lunes, 10 de junio de 2013

Jugadores inexperados en los Playoffs NBA 2013

Esta noche se ha disputado el segundo partido de las finales entre Miami Heat y San Antonio Spurs. Algunos jugadores como LeBron James, Tony Parker y Tim Duncan seguramente serán recordados en esta eliminatoria y, probablemente, uno de ellos se proclamará como MVP de las finales. Pero si viajamos a finales de abril, desde la primera ronda de estos Playoffs ha habido varias sorpresas muy positivas, jugadores inexperados que han marcado el devenir de algunas eliminatorias y que deben ser muy importantes en la NBA a partir de la próxima temporada. Por ello, es importante analizar los números de algunos de estos protagonistas. Vamos con un Top10 de jugadores inexperados:

Lance Stephenson (22 años, 1,96m.). El Shooting Guard nacido en Brooklyn fue una apuesta personal del ex General Manager Larry Bird para los Indiana Pacers, y en su tercer año en la liga por fin ha dado el salto de calidad que apuntaba desde su etapa de High School en Lilcoln (New York). Allí llegó a promediar 29 puntos y 10 rebotes en su última temporada, y en estos Playoffs ha sido una pieza muy importante en los planes de Frank Vogel al promediar 9,4 puntos, 7,6 rebotes y 3,3 asistencias para una eficiencia de +13.74. De hecho, sus números no son lo más importante, ya que su papel defensivo sobre Dwayne Wade durante toda la serie de finales de Conferencia Este nos habla de un jugador altamente competitivo y que gracias a su físico y agilidad puede ser una buena apuesta de estos Pacers para los próximos años. Supuestamente Vogel le ha prometido a Danny Granger la titularidad junto a Paul George a partir del próximo año si vuelve a su mejor nivel, pero no es descartable la salida del propio Granger para buscar jugadores de rol anotador desde el banquillo como JJ Redick (Orlando Magic) y Kyle Korver (Atlanta Hawks). Así, el papel de Stephenson podría crecer a pasos agigantados y consolidarse como titular indiscutible en un aspirante a campeón para los próximos años. Sus tareas pendientes son los tiros libres (62% en estos Playoffs) y la selección de tiros lejanos (28% en T3 también en Playoffs). No obstante, parece que su ética de trabajo ha mejorado y, por tanto, es de esperar un mejor rendimiento en sus porcentajes a partir del año que viene. La pelota está en el tejado de Donnie Walsh, presidente de los Pacers. Puede aplicar la Team Option para el año que viene por 981.000 dólares. Seguro que renovará, y quién sabe si puede conseguir incluso un contrato multianual cercano a los 5 millones. No es descartable.


Lance Stephenson atacando la defensa de Dwayne Wade en las Finales de Conferencia Este

Quincy Pondexter (25 años, 1,98m.). El alero de Fresno (California) no olvidará estos Playoffs tan especiales para él. De ser un jugador marginal en los planes de Lionel Hollins durante la Temporada Regular, se ha convertido en estos Playoffs en un jugador importantísimo para los Memphis Grizzlies. Su traspaso por Greivis Vásquez con los Hornets a finales de 2011 volvía a aparecer como un asterisco en la fatídica cartera de traspasos de Chris Wallace, General Manager de los Grizzlies, pero parece que con paciencia las apuestas de Wallace acaban dando sus frutos, al igual que los ha dado Marc Gasol. Pondexter estaba promediando un 54% en triples en semifinales, y sus 20 minutos estaban siendo importantísimos en la eliminatoria contra Oklahoma. Así, su gran defensa le permitió aparecer en las finales de Conferencia Oeste como un pilar básico de estos Grizzlies (a pesar del 4-0 contra Spurs), y demostró que si Hollins confía en él, tenemos jugador para rato. En 32 minutos de media ha promediado en las finales del Oeste 15,3 puntos, 3,3 rebotes, 1 asistencia y 1 robo por partido, superando con comodidad el 50% en Tiros de Campo y el 48% en Triples. Eso sí, en Tiros Libres estuvo muy mal con un 63% de media en las finales, aunque durante la Temporada Regular promedió un buen 78%. Viendo estos datos y su papel defensivo en el equipo, parece que será un gran sustituto de Tayshaun Prince para el año que viene. 2,2 millones de salario para él, pero un rendimiento que promete.

Quincy Pondexter celebrando una canasta

Chris Andersen (34 años, 2,08m.). El pívot de los Heat estaba sin equipo en 2013 tras ser amnistiado por los Nuggets el año pasado, y Pat Riley lo rescató acertadamente de la agencia libre con el objetivo de dar minutos de descanso a Chris Bosh. Cuál debe ser su sorpresa al comprobar que 'Birdman' está jugando los mejores minutos de su carrera. De hecho, está a punto de batir un record histórico de la NBA en porcentajes de Tiros de Campo. Andersen está promediando en estos Playoffs 7,2 puntos, 4 rebotes, 1,2 tapones y +11.12 de eficiencia, con el sorprendente dato de 82% en Tiros de Campo que está asombrando a toda la liga. Sorprende que éste porcentaje está por encima de sus promedios en Tiros Libres (76% en Playoffs). Andersen está aprovechando a la perfección todos los balones que le doblan en la zona para dejar bandejas a aro pasado, machacar o palmear tras rebote ofensivo. De esta manera ha conseguido 44 de sus 54 intentos de canasta, y supera en porcentajes a históricos como James Donaldson, Vlade Divac y Alonzo Mourning. A ver cómo termina las finales. Por 700.000 dólares su rendimiento está siendo grandioso, y los Nuggets se deben arrepentir de haberle amnistiado, ya que además le han pagado este año 4,5 millones y el año que viene todavia le deben otros 4,8. Por fin 'Birdman' ve la luz al final del tunel tras el escándalo de pornografía infantil en el que se vio implicado el año pasado.


Chris Andersen está jugando los mejores minutos de su carrera con los Miami Heat

Danny Green (25 años, 1,98m.). El escolta-alero de los Spurs formado en North Carolina no para de progresar en su carrera deportiva. 2012/2013 está siendo un gran año para él y puede culminar de la mejor forma posible, con el título de Campeón de la NBA. De momento, el 1-1 que han arañado los Spurs en el America Airlines Arena contra los Heat en las Finales de la NBA está marcado con un  9/14 en triples del ex de los Cavaliers (64% en T3), quien promedia en Playoffs 10,3 puntos, 4 rebotes, 1,8 asistencias, 1 robo y 0,9 tapones para un total de +12.75 de eficiencia. Popovich confía ciegamente en él, y por eso promedia más de 30 minutos en los 16 partidos que han disputado los Spurs en postemporada, con un gran 47% en Triples. Junto a Kawhi Leonard son los dos comodines de Popovich tanto en defensa como en ataque. Obviamente, Green tiene aún más potencial, está aportando cada vez más cosas en defensa, tiene que mejorar en rebotes, asistencias y manejo de balón, y no depender tanto de los pases de los compañeros para tirar a canasta, pero de momento es suficiente con su aportación. Incluso se está atreviendo en las finales a defender a LeBron James. Green es un jugador ambicioso que no puede faltar en este top. El año que viene cobrará 3,7 millones, y como el resto de jugadores de esta lista, se los merece dólar por dólar.

Danny Green es un pilar básico en los actuales Spurs
Jimmy Butler (23 años, 2,01m.). La historia de Jimmy es de esas que te quedan sin habla. Criado en un barrio periférico de Houston (Texas) su vida ha sido la de un auténtico superviviente. Su padre lo abandonó cuando era un bebé y su madre biológica, Londa, lo echó de casa a los 13 años porque, literalmente, "no le gustaba su aspecto y la manera en la que le miraba". En esas circunstancias, Jimmy fue dando tumbos de casa en casa de sus compañeros de colegio e instituto durante tres años hasta que fue acogido en la casa de los Leslie. Eran 7 hermanos, y pronto la historia de Jimmy Butler trascendió en la ESPN. Hoy, es su madre auténtica, Michelle Lambert, la que lo adoptó hace ahora 7 años, quien más puede sacar pecho por el alero que triunfó en la Universidad de Marquette (Milwaukee). Allí retiraron su dorsal número 33, y a este paso los Bulls acabarán haciendo lo propio con el #21 de Jimmy si el chaval sigue evolucionando al ritmo de estos Playoffs. El 'sophomore' ha promediado 13 puntos, 5 rebotes y 2,7 asistencias, en 41 minutos en pista, para una eficiencia total de +15.33. Además, encadenó una racha de tres partidos consecutivos jugando los 48 minutos del partido entre la serie contra los Brooklyn Nets y el primer partido contra los Heat en semifinales de conferencia. Ese record de 144 minutos consecutivos en Playoffs solo lo han conseguido otros 3 jugadores en los últimos 30 años: Karl Malone, Nick Van Exel y Allen Iverson. Tiene mérito para un jugador de segundo año pegarse esa 'minutada', con el agravante de que no se había perdido ni un solo partido de la Temporada Regular (jugó sin rechistar los 82 partidos). En las semifinales de conferencia contra los Heat Tom Thibodeau le dio plenos poderes ante los problemas físicos de Luol Deng (que estuvo hospitalizado por dolores de cabeza, e incluso los médicos llegaron a temer que tuviera meningitis), y Jimmy los aprovechó al máximo. Junto a Paul George y Kawhi Leonard, Butler ha sido uno de los valientes que se han atrevido a defender a LeBron James en estos Playoffs. Su postemporada ha sido de gran mérito y el año que viene promete consolidarse en el quinteto titular junto a Deng, Rose, Boozer y Noah. Solo cobrará 1,2 millones. Ya podemos decir sin miedo a equivocarnos que se trata de un 'gran robo' en primera ronda de 2011. Los Bulls tenían la última elección de primera ronda, y ahí salió Butler. Seguro que muchos GM se arrepienten de haberlo dejado pasar.

Jimmy Butler junto a su madre adoptiva Michelle Lambert

Harrison Barnes (21 años, 2,03m.). El alero formado en North Carolina no lo hizo mal en la Temporada Regular con los Warriors. Se ganó desde el primer día el puesto como titular gracias a un gran físico, esfuerzo defensivo y rápido acoplamiento al esquema de ataque del conjunto dirigido por Marc Jackson. Sus mates son su rúbrica, pero sus grandes Playoffs lo catapultaron al quinteto ideal de los rookies, pasando por encima de Michael Kidd-Gilchrist. Fue el novato que más lejos llegó, al menos por su gran protagonismo, y junto a Steph Curry, Klay Thompson y Jarret Jack fueron los únicos que lograron poner en apuros a los Spurs en todas las eliminatorias del Oeste. Barnes es un ejemplo para los otros rookies de los Warriors (Ezeli, Green y Bazemore) y ahora mismo se postula como el jugador con más progresión de toda su camada junto a Anthony Davis y Damian Lillard. Sus 16 puntos, 6,4 rebotes y 1,3 asistencias (+15,5 en eficiencia) durante los 12 partidos de Playoffs que jugaron los Warriors  son su gran carta de presentación en el difícil mundo de la NBA. Jugó 38 minutos por partido en las dos eliminatorias contra Nuggets y Spurs, estuvo muy bien en tiros libres (86%) y de cara a la próxima temporada tiene que seguir mejorando su tiro exterior (37% en estos Playoffs), que no es un porcentaje malo, pero un tipo como Barnes lo tiene que mejorar para ser el All-Star que todos nos imaginamos. 'Sky is the limit' para un jugador que cobrará el año que viene 2,9 millones de dólares, pero de seguir con esta progresión, es muy probable que los Warriors tengan que revisar su contrato cuando se liberen de los tóxicos Richard Jefferson y Andris Biedrins a partir del verano de 2014. Harrison Barnes aspira a todo y su historia nos recuerda mucho a la de Paul George. El año que viene vamos a flipar con este chico. A nada que gane algunos kilos, siga mejorando en defensa y tiros desde media-larga distancia, puede que lo veamos en el próximo All-Star de mayores, esta vez sí, junto a Curry. Bueno, esperemos que sea así, ya que Curry está maldito y para la NBA todavía no merece jugar ese partido.

Harrison Barnes machacando el aro de los Spurs en Semifinales de Conferencia Oeste

Reggie Jackson (23 años, 1,91m.). El base de los Thunder ha sido un protagonista inexperado en estos Playoffs. Con la lesión de Russell Westbrook en primera ronda contra los Rockets, inmediatamente todas las miradas enfocaron al banquillo, y Jackson no decepcionó a nadie. Independientemente de que Oklahoma se llevara un bochornoso 1-4 frente a los Grizzlies en semifinales de conferencia, la postemporada del base 'sophomore' de los Thunder ha sido grandiosa y le debería dar el derecho de jugar muchos más minutos a partir de la próxima temporada. Jackson jugó 34 minutos de media por partido en un total de 11 juegos, promediando 13,9 puntos, 4,9 rebotes y 3,6 asistencias para un total de +15.64 de eficiencia. Obviamente, con Westbrook en pista se hubieran multiplicado prácticamente por dos estos números, pero bastante mérito tienen para Jackson, pues sus estadísticas en estas series por el título triplican cualquier cosa que él hubiera hecho en estos dos años de carrera. Reggie Jackson tiene ambición, buenas piernas, buen físico y un gran instinto para buscarse canastas cerca del aro, además de un gran porcentaje en tiros libres (90% en estos Playoffs). No obstante, su pobre 30% en triples lastra su participación en el juego exterior. En la medida que mejore desde la larga distancia, estamos hablando de un jugador absolutamente necesario para estos Thunder saliendo desde la segunda unidad. De hecho, con los problemas en el puesto de '2' que ha tenido Oklahoma desde la marcha de James Harden, Jackson podría ser una solución jugando minutos junto a Westbrook el año que viene, porque seguramente Sam Presti no tenga ningún plan acerca de la continuidad de Kevin Martin, y Jackson, cobrando 1,3 millones (es decir, menos de la décima parte de lo que cobra este año Martin) puede arreglarles un poco la papeleta.

Reggie Jackson ha tomado el timón de los Thunder con decisión en estos Playoffs. A su lado el maestro Fisher

Iman Shumpert (22 años, 1,96m.). El escolta de los Knicks también ha dado un paso al frente en estas eliminatorias. Tras superar una grave lesión de rodilla el año pasado, el jugador formado en Georgia Tech comenzó a jugar en enero de 2013. Al igual que Ricky Rubio, Shumpert tardó varios meses en alcanzar su mejor forma, y en estos Playoffs ha demostrado la evolución que puede dar como jugador en las próximas temporadas. De momento, ya ha superado a su versión rookie, y aunque todavía tiene que mejorar su selección de tiro y asumir más protagonismo en ataque, en defensa ha doblado el número de rebotes con respecto al año pasado y sus porcentajes desde fuera han alcanzado un nada despreciable 43%, además de su gran fiabilidad desde la línea de tiros libres (86%). En total, en estos 12 partidos disputados por el escolta de los Knicks en las eliminatorias contra Boston Celtics e Indiana Pacers, en los cuales ha promediado 28 minutos por partido, Shumpert ha anotado 9,3 puntos, 6 rebotes y 1,3 asistencias para un total de +11.75 de eficiencia en estos Playoffs, destacando su gran actuación en el sexto juego de semifinales de conferencia contra los Pacers, a quienes acribilló con 19 puntos y un 5/6 desde la línea de 3 puntos, que, no obstante, no sirvió para prolongar un partido más el sueño neoyorquino. Si su progresión continua por buen camino, poco será para el rico bolsillo de James Dolan, dueño de los Knicks, pagarle la "miserable" cifra de 1,7 millones de dólares el año que viene.

A Iman Shumpert, escolta de los Knicks, le ha sonreido la suerte en estos Playoffs 2013

Jeff Green (26 años, 2,06m.). El alero de los Celtics por fin ha demostrado en estos Playoffs todo lo que apuntaba en los Thunder a finales de la pasada década. A sus 26 años aún tiene mucho por demostrar, y su papel en los Boston Celtics no para de crecer y evolucionar. En estos Playoffs los Celtics no pudieron superar a unos intratables Knicks, pero Green jugó su mejor baloncesto. Fueron solo 6 partidos, pero el alero de Maryland formado en la Universidad de Georgetown fue el máximo anotador de los verdes con 20,3 puntos, 5,3 rebotes y 2,3 asistencias para un total de +16,67 de eficiencia en 43 minutos de media. Sus problemas de corazón parece que quedaron definitivamente atrás tras superar con éxito una operación de aneurisma de aorta la pasada temporada que le tuvo todo el año en el dique seco. Muchos pensaban que Green no volvería al baloncesto, pero se equivocaron. Jeff Green ha vuelto y a partir del año que viene debería ser la referencia del equipo junto a Rajon Rondo y Jared Sullinger. En la renovación verde parece que no cuentan con Pierce y Kevin Garnett podría incluso retirarse, pero seguro que Green ya no será el sexto hombre del equipo, sino uno de sus hombres principales. 8,7 millones tendrán que separar de sus arcas los célticos para pagarle a este gran jugador. Parece un trato justo para sus méritos baloncestísticos.

Jeff Green fue el máximo anotador de los Celtics en la serie de cuartos de final contra los Knicks

10º Patrick Beberley (24 años, 1,85m.). Por último, cerramos el top10 con una de las sensaciones de primera ronda. En Oklahoma ya es el enemigo número 1 tras lesionar a Russell Westbrook en una jugada absurda en la que el base de los Thunder había pedido tiempo muerto, los árbitros ya lo habían concedido y Beberley fue a robar el balón con el partido parado, con la consecuencia de la lesión de menisco del propio Westbrook. No obstante, y a pesar de recibir llamadas de muerte desde Oklahoma, la jugada fue totalmente fortuita y se debe valorar a Beberley por lo meramente deportivo. Estamos hablando de un gran jugador defensivo pese a su escasa altura que ha sabido dirigir muy bien a los Rockets en la serie contra los Thunder sustituyendo a un mermado Jeremy Lin. Sus números han sido muy buenos en los 6 partidos que ha disputado, en los que ha promediado 33 minutos, 11,8 puntos, 5,5 rebotes, 2,8 asistencias y 1,2 robos para un total de +14.83 de eficiencia. En definitiva, el rookie de los Rockets disputó el doble de minutos en comparación a la Temporada Regular y sus números prácticamente se multiplicaron por dos. Un jugador muy a tener en cuenta para el futuro de los Rockets gracias a todo lo que es capaz de hacer en los minutos que disputa. Daryl Morey tiene una opción de 788.000 dólares para renovar al base de Chicago. Sería un buen recambio de Lin o de Chris Paul, si finalmente consiguen al actual base de los Clippers.

Patrick Beberley "se cargó" la rodilla de Westbrook, y con ella, los sueños de los Thunder




sábado, 14 de abril de 2012

Palencia Baloncesto tumba a Canarias en el Marta Domínguez (92-84)

Palencia se cuela en la fiesta del campeón


Palencia Baloncesto hizo los deberes al vencer merecidamente al flamante campeón de la Adecco Oro, Iberostar Canarias, que no se jugaba nada y así lo plasmó en la cancha, con momentos de poca o nula defensa, que permitieron a los de Natxo Lezcano anotar más de 20 puntos en cada uno de los cuartos. A pesar de la superioridad sobre el papel del conjunto aurinegro, a los pupilos de Alejandro Martínez les faltó esa pizca de ambición necesaria para defender al rival, y a pesar de cuajar un partido más que correcto en el apartado ofensivo –donde consiguieron 12 triples–, las lagunas atrás le dieron mucha ventaja a los palentinos para ganar el partido.

Jeff Xavier juega el Pick&Roll con Renan Leichtweis. Fuente: F.S
Lamentablemente para los morados, la 16º victoria de temporada no les acerca a su nuevo objetivo después de asegurar la salvación: jugar los ‘Playoffs’. Ya no dependen de sí mismos, como ocurría hace algunas jornadas, y una victoria más de Clavijo y de Breogán acabaría matemáticamente con el sueño de jugar la fase de ascenso, aunque vencieran en las dos últimas jornadas, ya que ambos equipos tienen el ‘basketaverage’ ganado con los palentinos.

No obstante, y como apuntaba posteriormente Lezcano en rueda de prensa, ellos solo podían jugar su partido y esperar resultados. Y eso sí lo hicieron los morados. Solo se puede poner un pero a su victoria; un ‘lapsus’ en todas las facetas del juego en los últimos 5 minutos del tercer cuarto que apretó las tuercas a favor de Canarias, gracias a un parcial de 10-20 que cambió el marcador de un 59-48 a un peligroso 69-68. Pero el resto del partido fueron superiores a su rival.

Comenzaron fuertes los castellanos con un demoledor 16-9. Palencia arremetía por el centro de la zona, consiguiendo siempre las ventajas para una canasta cómoda. Canarias estaba permitiendo trabajar muy sencillo a los dos hombres interiores de los morados: O’Leary y Moss; Carles Bravo se sumaba a los norteamericanos con dos triples, para un total de 23 puntos entre los tres en el primer cuarto. Los laguneros dependían en exceso del acierto exterior (6/10 en triples en el primer cuarto), pero desatendían el trabajo de desgaste en la zona palentina. Nico Richotti, con 11 puntos y 3 triples conseguidos, fue el mejor en el Socas en estos primeros minutos, y solo le acompañó el también francotirador Levi Rost, aportando 8 tantos.

Un grupo local de capoeira amenizó el descanso. Fuente: F.S.
Con el 27-25 en el marcador, los dos equipos se dieron una tregua en el global del segundo cuarto, pues la progresión apuntaba a un partido de más de 100 puntos. No obstante, Palencia siguió anotando hasta el 40-31 del minuto 15. Geoff McDermott le ganó todas las acciones en el 1x1 a Donaldson, y Xavier –quien jugó lastrado por un esguince de tobillo– también sumó un par de acciones positivas. Martínez pidió tiempo muerto en ese instante, ya que la apatía defensiva de los suyos les estaba costando el partido. Y le dio resultado. Sus jugadores se pusieron serios en defensa, superaron psicológicamente una antideportiva bastante rigurosa a Donaldson, y a través de los triples de sus jugadores exteriores igualaron el partido (44-43). Richotti estaba encendido, consiguiendo un fabuloso 4/5 en triples al descanso, pero una vez más apareció McDermott para estirar el marcador con dos canastas consecutivas que llevaron el partido al descanso a favor de Palencia (48-43).

En la segunda mitad la dinámica fue parecida para los locales. El trío O’Leary-Moss-Bravo siguió sumando muchos puntos en la zona, y Canarias solo respondía con dos triples más de Richotti y de un muy inspirado Jesús Chagoyen. El jerezano fue el mejor de su equipo con 19 puntos y 7 rebotes, demostrando su buen tiro exterior y su excelente lectura del juego en la pintura. Otra antideportiva –incluso más dudosa que la anterior– señalada a Levi Rost, más una canasta de Moss, puso la máxima diferencia para Palencia de 11 puntos (58-49), pero el recital de fundamentos de Chagoyen, más la aportación en la pintura de Lampropoulos y el trabajo ‘picapedrero’ de Richotti, le dieron la vuelta a la tortilla. Una canasta de Levi Rost ponía a los suyos por arriba en el marcador por primera vez desde el primer cuarto (66-68). No obstante, un triple de Mena cerraba el período a favor de Palencia nuevamente (69-68).

Jesús Chagoyen se la pasa a Nacho Yáñez. Fuente: F.S.
Los últimos 10 minutos fueron muy disputados, y solo la necesidad de Palencia por aferrarse al último tren con destino Playoffs decantó la balanza hacia el lado local. Pero no fue sencillo, pues el marcador continuó muy igualado hasta los últimos minutos. Una canasta de media distancia de un muy inspirado Quique Garrido comenzó a decidir el partido (78-76). Canarias estaba en el bonus, pero no aprovechaba sus viajes a la línea del 4,60, donde firmaron un pobre 18/27, con muchos errores en el último cuarto. Ian O’Leary conseguía un 2+1 importantísimo, y Palencia se iba de 4 (80-76). El californiano culminó una gran actuación con 19 puntos, 9 rebotes y 8 faltas recibidas, para un total de 29 de valoración. Fue un incordio para la defensa tinerfeña durante todo el partido. A falta de 3 minutos, muchas cosas se jugaban unos (con Rioja perdiendo en ese momento por 8 contra Melilla), y muy pocas cosas se jugaban los otros. Y precisamente por eso, ganaron los unos, en este caso Palencia. El capitán Carles Bravo volvió a demostrar que no le tiembla el pulso en momentos claves y consiguió un triple decisivo que ponía a Palencia 6 puntos arriba (83-77). Los canarios desaprovecharon muchos tiros libres a partir de ahí y Palencia puso la puntilla abriendo un hueco amplio en el marcador, que si bien no respondió a las diferencias reales durante el partido, sí hizo justicia con la victoria que merecieron los castellanos. No obstante, en el streaming de la jornada en vivo, Clavijo remontó, y a pesar de la gran ovación de la afición a su equipo, todos sabían que el sueño de los Playoffs se alejaba un poquito más.

Declaraciones:

Alejandro Martínez: El técnico catalán destacó los méritos de Palencia en los últimos instantes de partido, que decantaron la balanza a favor de los locales. “Hemos competido hasta el final, pero todo se ha decidido por errores nuestros y por las superioridades numéricas que conseguía Palencia en las transiciones. Palencia ha ganado porque ha hecho más mérito para ganar, es así de sencillo, pero que nadie piense que ha ganado porque nos hemos dejado. Teníamos las bajas de Guillén y Heras, además de otros problemas de lesiones durante la semana. Además, Martínez fue muy positivo con las posibilidades de disputar la ACB la próxima temporada. “Las gestiones van muy bien, aunque les pese a algunos. Estamos consiguiendo el dinero que nos piden y estoy seguro de que jugaremos la ACB la próxima temporada”, apuntó. Sobre el otro puesto de ascenso, Martínez ve favoritos a Menorca y Burgos, aunque no descarta a equipos como Breogán, Navarra y La Palma. “Van de tapados y no tienen nada que perder. Estará muy abierto y serán unos Playoffs muy duros”, concluyó.

Natxo Lezcano: El técnico palentino destacó la superioridad de sus jugadores desde el principio del partido. “Hemos empezado el partido dominando. Ellos estaban muy acertados en el triple, pero hemos jugado una buena primera parte, en general. En el tercer cuarto Canarias ha estado muy bien, pero al final hemos jugado mejor que ellos. No obstante, han demostrado su calidad. Han dominado la liga de principio a fin y esto es por algo. Tienen dos aleros como Rost y Yáñez muy altos, y nos han hecho mucho daño en la pintura”. No obstante, Lezcano no es muy optimista con los Playoffs. “Nosotros tenemos que ganar nuestros partidos y después esperar a ver qué pasa. El partido de La Palma será una final”. Para finalizar, explicó que le parece una “buena noticia” la retransmisión de las próximas dos temporadas de la liga por TVE, pero con matices. “Dependerá de cómo vendan el producto, como se retransmitan los partidos, reportajes de la competición, etc.”.

Palencia Baloncesto: Garrido (7), Bravo (16), Guerra (4), O’Leary (19), Moss (16) –quinteto inicial– Mena (5), Xavier (15), ‘Juanpe’ García (0), McDermott (10), Leichtweis (0)

Iberostar Canarias: Sabat (0), Richotti (22), Rost (13), Lampropoulos (12), Donaldson (7) –quinteto inicial– Fuentes (3), Zengotitabengoa (8), Yáñez (0), Chagoyen (19)

Crónica: Fernando Sancho


MVP del partido:
Ian O’Leary: 19 puntos, 9 rebotes, 1 tapón, 8 faltas recibidas y 29 de valoración.

Anti MVP del partido:
Albert Sabat: 0 puntos, 0/4 en tiros de campo, 3 balones perdidos y -4 de valoración.
Renan Leichtweis: 0 puntos, 0/1 en tiros de campo, 2 faltas personales y -2 de valoración.

Mejores jugadores del Palencia:
Roberto Guerra: 4 puntos, 6 rebotes, 1 asistencia, 1 balón recuperado, 1 tapón, 3 faltas recibidas y 14 de valoración.
Adrian Moss: 16 puntos, 3 rebotes, 4 balones recuperados y 11 de valoración.
Quique Garrido: 7 puntos, 3 rebotes, 9 asistencias, 1 balón recuperado y 16 de valoración.
Geoff McDermott: 10 puntos, 7 rebotes, 2 asistencias y 14 de valoración.

Mejores jugadores del Canarias:
Nicolás Richotti: 22 puntos, 1 asistencia, 5 faltas recibidas y 20 de valoración.
Jesús Chagoyen: 19 puntos, 7 rebotes, 3 asistencias, 1 tapón y 24 de valoración.
Asier Zengotitabengoa: 8 puntos, 3 rebotes, 2 asistencias, 4 faltas recibidas y 13 de valoración.

viernes, 9 de marzo de 2012

HERE WE STAY! - Larga vida a los Kings

El mundo del deporte alberga a veces historias hermosas, historias que consiguen emocionarte gracias a que incluyen el sentimiento de humanidad. Y la historia de los Kings tiene bastante de humanidad y emoción, ya que si fuera por las simples matemáticas y el interés comercial, este sueño habría acabado hace mucho tiempo. Si California fuera la Comunidad de Madrid, los Kings serían algo así como el Rayo Vallecano. Un equipo humilde entre los pequeños, pero grande como él solo. A Sacramento le querían robar su único motivo de orgullo: los Sacramento Kings. Pero sobre la bocina, y contra todo pronóstico, una serie de movimientos magistrales llevados a cabo por el alcalde de la ciudad, Kevin Johnson, apoyado en los hermanos Maloof, han obrado el milagro. Como bien dijo Johnson, antiguo jugador de baloncesto muy respetado en Phoenix Suns, "Yo he metido el primer tiro libre para ganar el partido. El segundo lo han metido los hermanos Maloof". Veremos qué consecuencias les trae a estos últimos su canasta, y si realmente han ganado el partido, como ellos esperan.

El apoyo de los aficionados ha sido fundamental para mantener a los Kings en Sacramento

De momento, la votación para aprobar el proyecto de construcción del nuevo pabellón, salió adelante este martes por 7 votos a favor, y tan solo 2 en contra. Este hecho le ha dado una victoria muy importante a Johnson dentro del ayuntamiento, y ha refrendado su triunfo en las elecciones de 2008, que tendrá que revalidar este año. Y no parecía nada sencillo, porque los rumores sobre el nuevo pabellón ya comenzaron en 2006, cuando la NBA pidió a varios equipos -entre ellos Sacramento Kings, Seattle Supersonics y Orlando Magic-, que construyeran estadios más modernos para poder seguir en la competición; y en el caso concreto de Sacramento, todas las dudas sobre la continuidad del equipo en la ciudad se fundamentaban en que el propio ayuntamiento aprobó, precisamente en 2006, una ley anti-endeudamiento que limitaba la aportación por parte de la ciudad a equipos profesionales del mundo del deporte. Sacramento tiene un índice de paro cercano al 13% y consideran un abuso subir los impuestos a los contribuyentes para sufragar esos gastos. Así, las Sacramento Monarchs, uno de los 8 equipos fundadores de la WNBA en 1997, tuvieron que desaparecer en 2009 debido a esta circunstancia, y la NBA permanecía muy escéptica sobre el apoyo económico de la ciudad de Sacramento a los Kings. Pero Johnson ha conseguido convencer al ayuntamiento en bloque y a los ciudadanos para llevar el proyecto adelante. Ha metido el 'clutch' más importante de su carrera, seguramente. Tanto en el deporte, como en la política.

"Los Kings se quedarán en Sacramento por los próximos 30 años. Eso espero", declaraba David Stern al final de los finales, en los "canutazos" improvisados en el pasillo de negociación, cuando toda la cúpula al completo, liderada por Kevin Johnson, y con Joe y Gavin Maloof detrás, dieron la noticia deportiva más importante para Sacramento de toda la década: los Kings no se movían de casa. Han firmado una prolongación de su licencia NBA por los próximos 30 años, en los cuales alquilarán el pabellón (en poder de la ciudad de Sacramento) por 3 millones al año. Es decir, jugarán en el Sacramento Arena, aunque legalmente éste no les pertenece a los Kings, sino a la ciudad de Sacramento y a todos sus inversores (entre los que se encuentran lógicamente los Maloof, y por ende, los Kings tendrán alrededor de un 40% de la propiedad de todo el complejo).

La jugada maestra se fraguó con algo de secretismo, mientras todo el mundo celebraba el show del All-Star en Dallas. Stern, Johnson, y los hermanos Maloof, aprovecharon que los focos estaban en otro lado para firmar un acuerdo muy importante durante el fin de semana de las estrellas. No obstante, el debate profundo llevaba abierto desde el año pasado, cuando la NBA dio un ultimatum al equipo y a la ciudad: o construían un pabellón nuevo y lo aprobaban el 1 de marzo, o el equipo se trasladaría a Anaheim, al suroeste de California.



El acuerdo se anunció finalmente el lunes 27 de febrero, 3 días antes del vencimiento del plazo acordado por la NBA (que finalmente se amplió hasta el 6 de marzo), y los términos de la negociación final son los siguientes:

El pabellón se creará en el distrito de negocios de la ciudad, cerca de una nueva estación de ferrocarril, y está presupuestado en 391 millones de dólares, después del acuerdo municipal al que se llegó a comienzos de este mes. Distintas empresas de leasing (un total de 11) se harán cargo de la explotación del parking del nuevo complejo, a cambio de pagar el alquiler de las instalaciones al ayuntamiento de Sacramento. La ciudad pondrá cerca de 200 millones en la construcción de ese parking, y espera recuperar en 50 años toda la inversión con las rentas pagadas por estas empresas. En total, Sacramento avalará 255,5 millones de dólares en todo el proyecto (en torno al 65% del montante total de la operación); el resto de los 391 millones se repartirán entre el propio equipo y empresas interesadas en la inversión. Los Kings aportarán inmediatamente un total de 73,25 millones de dólares, que serán fiados en su totalidad por la propia NBA, e irán reintegrando otros 75 millones a la ciudad en los próximos años. La empresa AEG (Anschutz Entertainment Group), empresa constructora que en su momento edificó el Staples Center de los Ángeles, pondrá otros 58,75 millones con motivo del concurso por la licencia y el patrocinio del nuevo estadio; y distintos hoteles de la ciudad, beneficiados por el impacto del nuevo pabellón, aportarán 30 millones.

Este dibujo se fraguó al final de las negociaciones, como refleja el diario local Sacramento Bee, donde se publicaron las cifras exactas de toda la operación. Sacramento asumirá una mayor parte de la responsabilidad y será la dueña del estadio, además de avalar toda la aportación económica que les corresponde a los propios Kings. Las obras comenzarán previsiblemente en el primer semestre de 2013 y estarán listas para la temporada 2015-2016. Desde el propio ayuntamiento confían en que la construcción se llevará a cabo sin problemas, pero reconocen que sería "un desastre" si todo el plan financiero fracasara. Así lo aseguraba el gerente de la ciudad, John Shirey, que cree que "Si se produce un desastre financiero, sería un problema tanto para nosotros, como para los Kings y para AEG".

Una familia especial

Pero la historia de los hermanos Maloof, quienes tienen que pagar cerca de 150 millones de dólares para seguir con su proyecto en la NBA, merece algunas pinceladas de tinta para ellos solos. Verán. Para sufragar su última aventura (además, última en sentido literal, a la vista de las deudas que acumulan en el resto de negocios) pretenden vender el Arco Arena por 25 millones, más algunos terrenos aledaños al estadio para liquidar parte de esa primera aportación. Los otros millones, toda vez que cada día están más endeudados, saldrán de las arcas de Wells Fargo, entidad que les presta el dinero asiduamente, debido al respeto que tienen por su padre, George Maloof Sr. (fallecido en 1980 y 'ex' propietario de los Houston Rockets), quien era uno de los principales accionistas de la entidad. Ahora esas acciones están en manos de sus hijos.

Además, se espera una subida generalizada del precio de los abonos de temporada, entre un 15 y un 20%, que les aportarán a los Maloof un extra de 9 millones al año para ir pagando esos millones 'mágicos' que salen del banco. Las espectativas, en este caso, son buenas, ya que el equipo ha registrado un aumento del 7,4% en la venta de entradas desde el 'boom' del 'Here We Stay!', el movimiento de apoyo que crearon los aficionados a raiz de los rumores sobre la marcha del equipo a Anaheim. Esta es la mayor subida de toda la liga en este apartado. Veremos si el apoyo de la afición solo era un ramalazo de orgullo para que el equipo se quedase en la ciudad, o se convierte en una realidad duradera. Recordemos que el Arco Arena (actual Power Balance Pavilion) tiene una capacidad algo superior a los 17.000 espectadores, después de una reforma en 1988 que amplió el aforo en casi 7.000 localidades. Pero no es suficiente. Orlando Magic ya se mudó en 2010 del Amway Arena al Amway Center porque el Arena también tenía este problema de aforo, muy similar al del actual pabellón de los Kings. En el Amway Center se reúnen en torno a 18.500 personas actualmente, cifra que se le exige al nuevo Sacramento Arena.

La NBA quiere 'megacomplejos', mastodontes con más de 18.000 localidades y adaptados a todas las comodidades de hoy en día. Y con ese ánimo le pide a Sacramento un nuevo pabellón para cumplir sus deseos. El nuevo Sacramento Arena contará con 18.500 espectadores, previsiblemente, según el acuerdo ratificado en los últimos días. Así, los Kings modernizarán su franquicia, pues hasta ahora contaban con el pabellón más barato de toda la NBA, ya que solo les costó 40 millones en el momento de su construcción y posterior ampliación, allá por 1988, y la NBA les exigía algo más moderno, mejor comunicado y más en consonancia con el pulmón financiero de la ciudad. Y eso toca pagarlo. A pesar de las discrepancias del hermano pequeño de la familia, George Maloof.

Por orden: Joe Maloof, Kevin Johnson y Gavin Maloof celebran el acuerdo
Para tener una idea aproximada sobre el estado de los negocios de los hermanos Maloof, solo un dato: el pasado 19 de noviembre se confirmó que cedían el control del Palm Casino (su propiedad 'joya de la corona' en Las Vegas) a sus acreedores por unas deudas insostenibles: 459 millones de dólares. Ahora solo les quedará el control de un simbólico 2% del casino, en poder de George, el hermano pequeño que ya no quiere saber nada de las locuras de Joe y Gavin, los hermanos mayores que se lo pasan 'teta' con sus Kings, pero no son conscientes, aparentemente, de su inaptitud para los negocios. No obstante, George tampoco es un santo. Él se lo pasa igual de bien apareciendo en la serie 'Las Vegas', en el mítico casino 'El Montecito', que no existe en la realidad, pero como plató gigante que es, se ha convertido en la cuna del famoseo en la ciudad de Nevada, y los Maloof no se pierden ni una; y al parecer, el bueno de George Jr. también destaca por 'empinar' el codo con bastante asiduidad. En 2010 fue arrestado por conducir en estado de embriaguez al volver de una boda, aunque él argumentó que no había estado cerca de nada que pudiera emborracharle. También se le conoce por ser amigo de Britney Spears, lo cual nunca se sabe si debe ser interpretado como un honor, o como una desgracia. Es dueño de unos estudios de producción musical y se mantiene bastante al margen de las hazañas de sus hermanos mayores (ya tiene bastante con las suyas propias).

Además de la decadencia en el negocio de los casinos, los hermanos Maloof arrastran casi 100 millones de deuda en los Kings desde 1998, año en el que se hicieron con el control del equipo. Aunque no se puede achacar este desfalco a su gestión, ya que ellos asumieron casi 80 millones al inicio de su misión, es una piedrecita más en su camino como empresarios, y hace pensar en que quizá no han hecho grandes inversiones en el mundo de los negocios. Si a esto le sumamos la venta en 2010 de la empresa de distribución de bebidas que llevó a su padre a a ser un tipo respetado en Nuevo México, el repóker de desastres ya es completo. ¡Menuda gestión de la herencia!

Esta es la historia de los Maloof, unos tipos peculiares, igual que lo es su equipo: Sacramento Kings, quizá, uno de los equipos más genuinos y especiales de la competición. Como rezaba el lema más popular entre los aficionados desde la pasada temporada: HERE WE STAY! (algo así como, ¡Aquí nos quedamos!, con nuestros cencerros, nuestra fama de 'paletos' y nuestras camisetas moradas). El lema se ha quedado antiguo, y ahora será sustituido por el Here We Stay(ed), porque en Arco Arena, a partir de 2015, solo quedarán la camiseta de Mitch Ritchmond, Vlade Divac y Chris Webber, colgando del techo. El equipo se mudará al Sacramento Arena.

Las ciudades afectadas

En ningún otro lugar se representa tan bien la esencia de los Kings como en Sacramento. Ni siquiera en Rochester (Nueva York), donde los Royals ganaron un anillo allá por la década de los 50. Sacramento lleva 27 años, concretamente desde 1985, siendo el anfitrión de los Kings, y si se confirman las palabras de David Stern, sólo sería la mitad de vida que le queda por vivir al equipo en Sacramento.

Pero esta circunstancia había creado una sensación de falsas esperanzas en ciudades como Anaheim o Seattle, principales candidatas al traslado de la franquicia. Ahora, con la continuidad del equipo en Sacramento, las ilusiones de ambas ciudades han caído en picado. El alcalde de Anaheim, Tom Taid, felicitó a Sacramento y les deseó lo mejor en su renovada andadura, pero aseguró que la pequeña ciudad de Anaheim está preparada para albergar un equipo en la NBA. No obstante, a pesar de su tamaño, tiene el control sobre el equipo de la NHL Anaheim Ducks, presidido por el magnate Henry Samueli, quien sin duda ha salido perjudicado con la estancia de los Kings en Sacramento.

Por su parte, Seattle, la ciudad que se quedó sin su franquicia histórica de los Supersonics en 2008, ha anunciado que a pesar de que los Kings se quedan en Sacramento y no se moverán a Seattle, van a reformar el antiguo pabellón para ser viables de cara a volver a albergar en un futuro un equipo en la NBA. Tenían un problema muy parecido a los Kings, pues la NBA también les dio un ultimatum para reformar el estadio Key Arena, pero en este caso no hubo acuerdo entre la ciudad y el equipo, por lo que los Supersonics se mudaron a Oklahoma City, donde actualmente se denominan Thunder.

Sin embargo, este no ha sido el final de los Kings, aunque ha estado muy cerca de serlo. La historia contará que se quedaron en Sacramento durante otras largas 30 temporadas, donde fueron felices, y comieron perdices...

lunes, 6 de febrero de 2012

Tercera victoria consecutiva para los morados

PALENCIA BALONCESTO 72 – 65 C.B. BREOGÁN LUGO

Guerra manda a la UCI al Breogán

Roberto Guerra, con el 6 a la espalda, debutó el pasado viernes. Foto: Fernando Sancho
Apenas lleva dos días en la capital palentina, pero Roberto Guerra ya sabe lo que es decidir un partido en su nuevo equipo. Dos triples fundamentales en el último cuarto –el segundo, un lanzamiento afortunado desde más de 8 metros– fueron suficientes para desatascar un partido malo, bregado y feo, que se le había complicado muchísimo a Palencia gracias al pundonor y acierto de Papa Diasse, el nuevo pívot senegalés de los lucenses.

El Breogán, un grande venido a menos esta temporada, se vio gafado en su mejor faceta, el tiro exterior, y eso le pesó durante todo el partido. Sus dos referencias en la anotación, James Feldeine y Sean Ogirri, estuvieron muy desacertados, firmando entre los dos un paupérrimo 2/11 desde el 6,75, y contagiando al resto del equipo, que terminó con 4/17 en triples. Además, las innumerables pérdidas de balón (18 en total), le dieron canastas fáciles a los palentinos a la contra, sobre todo en la segunda mitad.

El comienzo de partido fue muy frío, muy áspero, tanto como lo era la noche castellana. Los 5 °C negativos del ambiente congelaron el inicio, y solo una timorata canasta de Carles Bravo abrió el marcador ya pasados más de dos minutos. En Breogán, Brooks Sales comenzó muy inspirado, anotando 8 puntos en apenas cinco minutos. Palencia vivía de acciones puntuales de Bravo y Quique Garrido, además del inconmensurable Adrian Moss, que fue el MVP del partido con 28 de valoración, y en el primer cuarto ya llevaba 10. La defensa fue la tónica de los primeros diez minutos, donde solo se vio un triple. Palencia abusó demasiado del 1x1, y muestra de ello fue que solo dieron 1 asistencia en los primeros 10 minutos (y en los primeros 20, también). Breogán dependía demasiado del acierto de Sales, y pagaba desde el inicio el movimiento lento de balón en ataque con 6 pérdidas.

El resultado era muy bajo para los guarismos que suelen conseguir ambos contendientes (16-14). Aún así, el segundo cuarto se rigió por la misma doctrina. Palencia tampoco estaba especialmente inspirado en el triple (2/8 al descanso), pero al menos lograba terminar las posesiones. Breogán aprovechó el desacierto morado para ponerse 3 arriba en el marcador (18-21, su máxima diferencia en el partido) con un triple de Edu Sánchez y una canasta de Ogirri. Las 2 faltas personales de Quique Garrido en el primer cuarto estaban atenazando la dirección de los palentinos. Raúl Mena no lograba mover al equipo, demasiado estático en ataque y seleccionando muy mal los tiros. No obstante, apareció Jeff Xavier para desatascar la situación, consiguiendo 5 puntos consecutivos que levantaron de nuevo la moral de los locales (25-21). Lezcano aprovechó la buena racha anotadora de los suyos para darle la alternativa al protagonista de la noche: Roberto Guerra, quien debutó en el minuto 15 con la camiseta morada. Curiosa y lamentable paradoja, en el equipo rival estaba Carlos Cobos, hasta hace 15 días compañero de penurias económicas en Granada.


Geoff McDermott jugando un 1x1 frente al norteamericano Brooks Sales. Foto: Fernando Sancho

En Breogán, James Feldeine no era capaz de superar a Xavier ni en ataque, ni en defensa, yéndose al descanso con apenas 4 puntos en su haber. Una canasta del jamaicano Geoff McDermott (importantísimo en el esquema defensivo de Natxo Lezcano), culminaba un parcial de 9-0 y ponía a Palencia 6 puntos arriba (27-21). Pepe Rodríguez pidió tiempo muerto para intentar arreglar el resultado al descanso, y parece que lo consiguió. Feldeine cortó la racha morada, y dos acciones positivas de Manu Gómez igualaron el partido (29-27). Palencia, horroroso en el juego colectivo, se encomendaba a la espectacularidad de Ian O’Leary, que consiguió un mate llegando desde atrás, y a un 2+1 de Adrian Moss. Lezkano planificó la última jugada, y de nuevo Moss aprovechó para anotar (33-29 al descanso). Ambos equipos estaban jugando con muchas dudas; Palencia por su escasez de juego colectivo (tan solo 1 asistencia), y Breogán por su mal juego exterior (1/7 al descanso), y las 10 pérdidas de balón. En el apartado individual, Adrian Moss seguía engordando las estadísticas con 8 puntos, 4 rebotes y 4 faltas recibidas, para un total de 16 de valoración; y en el cuadro gallego Manu Gómez, con 6 puntos, 4 rebotes y 9 de valoración, era el jugador más destacado.

El segundo tiempo rompió todos los esquemas de la primera mitad. Palencia imprimió mucho más ritmo, aprovechando los continuos regalos en forma de balones perdidos de Breogán, y se fueron en el marcador con un 14-2 de parcial. A pesar del 3+1 de Ogirri que igualaba el marcador a 35, Breogán se vio superado al contraataque por Carles Bravo, ante la nula defensa de Krabbenhoft. Por fin Palencia intuía espacios en la defensa lucense, y todos se sumaron a la fiesta. El 45-37, con una canasta de Xavier, fue el punto de ebullición en el banquillo, y Rodríguez volvió a congregar a los suyos para resolver el problema. No obstante, Palencia extendió la distancia hasta los 10 puntos (47-37), gracias a un canastón ‘fadeaway’, marca de la casa de Adrian Moss. Rodríguez decidió probar entonces a su nuevo fichaje, Papa Diasse, que apenas había jugado en la primera parte. Nada más entrar anotó un triple, y Breogán le devolvió el abultado parcial a Palencia con un 2-8. James Feldeine y Álex Navajas redujeron la distancia a 3 puntos. Jeff Xavier estaba echando por tierra todo el trabajo ofensivo de sus compañeros, jugándose canastas inverosímiles que provocaron el acercamiento de Lugo. McDermott y O’Leary arreglaron con sendas acciones positivas los errores de su compañero. Se llegó al final del tercer acto con 52-48. Breogán aún estaba en el partido, gracias sobre todo al pundonor final de Feldeine y Navajas.

Jeff Xavier controla la bola ante la defensa de Sean Ogirri. Foto: Fernando Sancho
El último periodo ahondaba en la crisis existencial de los morados. Un triplazo de Feldeine, más dos acciones positivas en el poste bajo de Diasse ponían por arriba en el marcador a los gallegos después de muchos minutos (54-55). Palencia estaba totalmente atascado en ataque, y entonces apareció el alero de Las Palmas Roberto Guerra, que con dos triples consecutivos (el segundo, inverosímil cuanto menos) encendió a la afición y atenazó la voluntad de los lucenses. Ian O’Leary continúo el espectáculo con un alley-hoop espectacular de espaldas, que recordó a aquella genialidad en copa de Rudy Fernández. Y la fiesta no paró. El parcial de Palencia se fue a 10-0 con un triple de Adrian Moss (66-56). Breogán estaba cerca de besar la lona, y los últimos minutos cobraron un interés especial, ya que ambos equipos se jugaban el ‘basketaverage’ particular, que lo tenía Breogán a favor tras el 76-66 de la ida. Palencia no logró finalmente su objetivo, ya que Edu Sánchez y James Feldeine tiraron de orgullo para impedirlo. No obstante, el 72-65 final fue un fiel reflejo del último arreón palentino, y un buen indicio del rápido acoplamiento de Roberto Guerra con el equipo y con la afición morada. Palencia alcanza con este triunfo el 50% de victorias, y mira hacia arriba en la clasificación con el próximo objetivo de vencer a Clínicas Rincón en tierras malagueñas. Por su parte, Breogán se volvió a casa con una derrota muy dolorosa, y con claros indicios de sufrir mucho esta temporada. De momento, están solo una victoria por encima del ‘Playout’. Mala despedida para un equipo y una afición digna de mención, que siempre animó a su equipo y se llevó una gran ovación por parte del respetable del Marta Domínguez.

Declaraciones:

Pepe Rodríguez: El técnico lucense analizó el encuentro destacando el cariz defensivo de ambos equipos, que se quedaron muy lejos de su media anotadora en temporada, en torno a los 80 puntos. “Fue un partido duro, con dos equipos concentrados en la defensa, con mucho contacto. Cada canasta costaba un mundo. Palencia ha encontrado un momento mágico y ha desequilibrado al final. Me quedo con los dos triples de Guerra, afortunados pero muy importantes”. Además, Rodríguez calificó la actuación del MVP del partido, Adrian Moss, como “soberbia”. “Tomó decisiones muy buenas para desatascar el partido. Se ha salido esta noche. Nosotros hemos estado muy mal en los triples. Veníamos como el segundo mejor equipo del campeonato en porcentajes de tres puntos y hoy solo hemos conseguido un 4/17. Nuestro nivel sube y baja como una ruleta rusa, pecamos demasiado de irregularidad.” No obstante, como apunte para los próximos partidos, destacó el trabajo de Papa Diasse, que anotó 7 puntos y 3 rebotes en apenas 14 minutos de jugo. “De cara al futuro Diasse será importante ante la baja de Andy Ogide”, apuntó.

Natxo Lezkano: El entrenador palentino explicó las claves del encuentro. “La clave ha sido no dejarles correr y estar muy duros en defensa. Fue un partido sin ritmo ni acierto. Los dos equipos no solemos jugar así. Nosotros hemos intentado correr, pero no hemos encontrado las ventajas, sobre todo en el primer tiempo. Pero en los días malos también hay que dar la cara, y eso se lo he dicho a los jugadores en el descanso. Adrian Moss ha estado en un buen nivel, como toda la temporada”. Sobre el papel fundamental de Roberto Guerra en el último cuarto Lezcano apuntó, “Roberto está bien y ha jugado más de lo que yo pensaba. Ha tenido la fortuna de meter el triple lejano. Ya dije en la presentación que es un jugador ‘todoterreno’. Nos va a dar experiencia y madurez, y sobre todo comete muy pocos errores”. No obstante, y a pesar de que el equipo ha alcanzado el 50% de victorias en temporada, Lezcano reconoce que el objetivo es ir a por las 14 victorias que dan la salvación. “Ahora toca ir a Málaga y olvidarnos de las clasificaciones. Clínicas Rincón va a ganar más partidos, y no queremos ser los damnificados”.

Palencia Baloncesto: Garrido (4), Xavier (11), Bravo (12), O’Leary (11), Moss (19) –quinteto inicial– Mena (6), Guerra (6), McDermott (3), Leichtweis (0).

C.B. Breogán Lugo: Cobos (1), Feldeine (15), Krabbenhoft (2), Navajas (5), Sales (11) –quinteto inicial– Edu Sánchez (7), Ogirri (10), Bortolussi (0), Manu Gómez (7), Papa Diasse (7).

domingo, 1 de enero de 2012

Cuarta derrota consecutiva de los palentinos

PALENCIA BALONCESTO – UB LA PALMA: 64-67

Luke Sikma acaba con el cuento de navidad de Palencia


Si los resultados hablasen, hoy lo harían acerca del jugador del estado de Washington Luke Sikma. No solo espoleó a La Palma hacia el décimo triunfo con sus 17 puntos, 10 rebotes y 2 recuperaciones, sino que asumió la responsabilidad de guiar en los últimos minutos a un equipo asustado por el ambiente y la presión. Y eso solo está al alcance de los grandes de este deporte. Es difícil asegurar donde está el tope de este jugador, pero con sangre NBA en los genes, se entiende mejor su comprensión de juego, sus fundamentos y su don de técnica individual, al alcance de muy pocos pívots en la liga.

Roeland Schaftenaar postea defendido por Moss. Foto: Fernando Sancho
El cuento navideño de Palencia se encontraba a dos minutos del final con cinco puntos a favor. Nadie podía pensar en nada más que asegurar la octava victoria de temporada en un partido extraño, que estuvo marcado por la efectividad defensiva de ambos equipos, ya que en ningún momento demostraron la gran fluidez en ataque de la que sí han hecho gala en el resto de partidos. Un triple de Carles Bravo parecía poner la puntilla al partido. Con 64-59 en el marcador, el Marta Domínguez se levantó de sus asientos y entonaron un merecido: “Capitán, capitán, capitán”. El jugador catalán merecía ese reconocimiento. Fue el alma de una nueva remontada –no obstante, frustrada por el gran Sikma– con 5 triples anotados y 19 puntos. Los halagos tapaban incluso todos los reproches que ha escuchado en Palencia en los últimos años.

Pero no todos los cuentos terminan con final feliz (para Palencia, lógicamente). Como si de una trama de James Wan se tratara, el muerto resucitó entre el charco de sangre, abrió la puerta y se marchó de la habitación del gas. Allí quedó encerrado Palencia, por lo menos a la vista de la pobre gestión del resultado que demostró en el último minuto. Y entonces sonó una cinta. Era el propio Luke Sikma explicándole a Palencia por qué le había llevado hasta el final del juego con vida, para después anotar 7 puntos en los últimos 3 minutos y conseguir un robo de balón con el 64-66 a favor de La Palma y posesión para Palencia. Decía algo parecido a que un equipo que no sabe cerrar los encuentros cuando tiene la victoria en bandeja, suele perder de manera trágica, ejecutado a sangre fría. En este caso, la de Luke Sikma. Game over.

Y la trama del partido no tuvo más ‘trampa’. Palencia empezó el primer cuarto perdiendo de 15 puntos (13-28). Eso ya había pasado en Tarragona y en otros partidos que también terminaron con derrota para los de Natxo Lezcano. Entre Christian Díaz y Álex López estaban castigando la lentitud de Palencia en la salida de balón, e imprimiendo al juego un ritmo espectacular, que les llevó en apenas 6 minutos a tener una ventaja de 12 (8-20). Roeland Schaftenaar enchufó dos triples para aumentar la sangría y Palencia respiró aliviado cuando sonó la bocina de final de cuarto.

Los niños del colegio de Villada apoyaron al Palencia. Foto: Fernando Sancho
La defensa asfixiante a toda cancha de La Palma era la propia medicina que suele aplicar Palencia. Entonces, se vieron a sí mismos encarnados en el espíritu rival y debieron confundirse para tener un inicio tan nefasto. El segundo cuarto fue otra cosa. Intercambiaron los roles y ahora la defensa presionante la ponía Palencia. Un gran ‘Juanpe’ García ‘secaba’ totalmente a Román Martínez, quien se fue al descanso con los mismos puntos que había anotado en el primer cuarto: 6. Además, el acierto de Bravo y la intensidad defensiva de Ian O’Leary y Michel Diouf (10 puntos y 9 rebotes entre los dos) acercaban peligrosamentEe a su equipo. 32-38 al descanso.

La reanudación siguió un guión muy similar, con Palencia ahogando a La Palma en la pintura y remontando la gran diferencia del primer cuarto. El trío Bravo-O’Leary-Diouf siguió aportando gran parte de los puntos y rebotes de Palencia, que no obstante echaba de menos a su estrella: Jeff Xavier. Su -2 de valoración no se esperaba por los pagos castellanos. Sí su pésimo 1 de 6 en triples, que suele ser la norma para el escolta de Cabo Verde. Tampoco aparecía Adrian Moss, muy discreto con 7 puntos en tres períodos. Y La Palma seguía calentando muñeca, con un perfecto 6 de 6 en tiros libres y Luke Sikma minimizando daños (17-12 en el tercer cuarto).

El final fue emocionante. Con un partido en ciernes ‘a la griega’ (49-50), ambos tuvieron que adaptar su fuerte ritmo a un intercambio de aciertos defensivos y errores en el tiro. Quique Garrido –otro que no tuvo hoy su día– ponía por delante a Palencia por primera vez en todo el partido (51-50), pero Luke Sikma (como no) devolvía la ventaja de nuevo al conjunto palmero. Un intercambio de triples entre Bravo y Óscar Alvarado daba ‘vidilla’ al encuentro, que cada vez se parecía más a un partido de la categoría Leb Oro. Esa pérdida de miedo por los dos bandos puso a Palencia por delante (59-55). Además, en defensa O’Leary aparecía con un tapón espectacular sobre Bonhome que parecía ‘blindar’ el resultado.

Ian O'Leary se lesionó y es duda para el partido de Lleida. Foto: Fernando Sancho
Pero una vez más, un 2+1 salvador de Luke Sikma más una canasta de Álex López, devolvían el empate al marcador (59-59). Con tres minutos por jugarse, Palencia sufrió el infortunio de dos lesiones importantes: Raúl mena por conmoción e Ian O’Leary por problemas en su pierna izquierda. No obstante, una canasta de Moss y un nuevo triple de Carles Bravo ponían el 64-59 en el marcador. Después, ya saben, sonó la cinta y apareció la voz enlatada de Luke Sikma. Con 7 puntos fue el ejecutor de un Palencia dubitativo que tuvo miedo a ganar, y de regalo se llevó una derrota. Román Martínez colaboró con dos tiros libres anotados y con 30 segundos por jugarse, un robo de Sikma en línea de pase entre Garrido y Moss dejó al Palencia definitivamente en la cuneta. Finalmente, un triple lejano de Xavier pudo llevar el partido a la prórroga, pero no entró. Victoria importantísima para el equipo canario que cierra 2011 en cuarta posición y con un colchón de dos victorias sobre el último puesto de Playoff (Girona 8-8). Por su parte, Palencia cosecha la cuarta derrota consecutiva y ve ya de lejos su gran inicio de temporada.


Declaraciones:

Carlos Frade:
El técnico canario destacó el gran trabajo de su equipo. “Tenemos ambición y ganas de hacer las cosas bien, y estamos demostrando un gran esfuerzo”. Además, explicó que la defensa a toda cancha que puso su equipo en práctica durante gran parte del partido “Forma parte de nuestra identidad. Desde el minuto 1 hasta el 40 de todos los partidos este equipo defiende con la misma intensidad”. Sobre el gran partido del pívot Luke Sikma valoró su compromiso y el robo de balón en la última jugada, y no quiso irse sin felicitar a Palencia. “Son un equipo muy serio, trabajador y que tiene grandes conceptos de baloncesto. Si entra o no entra el último tiro son cosas del juego"

Natxo Lezcano: “Hemos salido muy mal desde el principio, con muy poca agresividad y ellos muy veloces, con mucha intensidad. En defensa nos han hecho ir a remolque hasta el final del partido. Después nos hemos entonado atrás, y hemos hecho una gran defensa que nos ha permitido remontar, pero al final no hemos sabido ganar. Sikma ha hecho un partidazo y hay que felicitarle”. Además, el técnico vitoriano explicó que el equipo había llegado demasiado cansado física y sicológicamente al final del encuentro, y le pidió a 2012 “intentar acabar bien la temporada, con un resultado que deje satisfechos a la afición y al equipo”.

Palencia Baloncesto: Garrido (3), Xavier (6), Konate (3), Moss (9), Diouf (7) –quinteto titular– Mena (4), ‘Juanpe’ García (4), Bravo (19), O’Leary (9).

UB La Palma: Díaz (9), López (6), Martínez (9), Peña (9), Sikma (17) –quinteto titular– Alvarado (5), Arrocha (0), Bonhome (0), Domínguez (0), Konate (0), Schaftenaar (12).

Crónica: Fernando Sancho

sábado, 17 de diciembre de 2011

Se rompe la gran racha de los palentinos


Palencia Baloncesto – Menorca Bàsquet (67-71)

Menorca asalta el ‘Marta Domínguez’ en un genial último cuarto

Se terminó la racha de victorias consecutivas en casa del Palencia. Esta noche el conjunto de Natxo Lezcano se arrugó en los momentos finales y dejó escapar un partido que tenía en el bolsillo. Menorca, por su parte, supo gestionar con más temple las últimas posesiones y aprovechó la profundidad de banquillo para llevarse una victoria importantísima fuera de casa. Ya es la tercera consecutiva, después de las conseguidas en Burgos y en La Palma, lo que sitúa a los hombres de Chema Berrocal a solo una victoria de los líderes de la competición de los humanos: Burgos y Lleida. Es decir, de los equipos que no son Canarias, que ya compite en otras lides.

El noveno triunfo de Menorca se fraguó a partir del segundo cuarto. En el primero salieron dormidos, dando la sensación de estar todavía calentándose de la helada castellana. Aguantaron hasta el empate a 6, pero después se dejaron ir cediendo una desventaja de 12 puntos (17-8) en el minuto 6 de partido. No podía ser. Palencia iba en proyección de 120 puntos ante el mejor equipo defensivo de la competición. La sangría se frenó en el 22-10 de final de cuarto. Ni Otegui, ni Oliver Arteaga eran capaces de parar las embestidas de un inspiradísimo Adrian Moss -8 puntos en el primer cuarto- y del ‘Gran Capitán’ Carles Bravo, autor de 7 puntos.

Los 18 puntos de Adrian Moss no fueron suficientes paar evitar la derrota de Palencia. Foto: Fernando Sancho

En el segundo cuarto el partido mutó a soporífero. Posesiones largas al borde de la bocina y muchísimas imprecisiones por parte de los dos equipos. Era el partido que le convenía a Menorca, a tanteador bajo. Los baleares redujeron la diferencia a 6 de la mano de Dani Pérez y en Palencia tan solo aparecía a fogonazos Ian O’Leary, que siempre disputaba el rebote ofensivo a los pívots insulares y sacaba buenos réditos. Al final de la primera parte consiguió 12 puntos y 7 rebotes, que unidos a los 16 puntos de Moss mantenían a Palencia por delante (37-29). En Menorca brillaba Dani Pérez por su dirección y anotación (8 puntos).

No obstante, ambos equipos se animaron tras el descanso. David Navarro y Arteaga acercaban a su equipo a solo tres puntos (41-38), pero Palencia volvía a marcharse gracias a un 2+1 de Kyle Swanston –sigue en el equipo por la baja de Jeff Xavier– y el coraje del californiano O’Leary. Varias acciones positivas de Andreu Matali acompañadas de un triple del hoy irregular Jorge Jiménez, ponían el 48-44 en el marcador, pero un triple de Swanston y dos acciones espectaculares de O’Leary, machacando el aro balear, devolvían el partido a las ventajas del primer cuarto (55-46). Sin embargo, Menorca aplicó la lógica del razonamiento al juego y no desesperó. Siguieron los balones en la zona a Arteaga, que jugaba con inteligencia forzando personales de Palencia, y apareció el eléctrico Marc Blanch para reducir la sangría (57-50 al final del tercer periodo). Palencia no estaba defendiendo demasiado. Michel Diouf apenas jugó 10 minutos hasta el último cuarto y los ‘morados’ vivían de las asistencias de Mena (5) y la brega en la pintura de O’Leary: 14 puntos y 11 rebotes –7 de ellos ofensivos–.

Kyle Swanston lanza un triple ante la oposición de Matali. Foto: Fernando Sancho


El último período certificó y dio fe de un calamitoso Palencia Baloncesto al que no le salió nada en comparación con los otros tres cuartos, y ensalzó la figura de un incógnito hasta el momento: Roberto Morentín. El pucelano escenificó el horroroso 2 de 12 en tiros de dos de Palencia en este cuarto asegurando los rebotes defensivos y anotando un triple que metió definitivamente a Menorca en la pomada (62-57). Los de Berrocal hacían el trabajo de la hormiguita, poco a poco pero sin descanso. El banquillo era infinito. Salía Otegui y entraba Arteaga; se iba Matalí y Moncasi le sustituía. Y así iban cansando poco a poco a los palentinos. Moncasi se merendó fácilmente a Renan Leichtweis –no está siendo su temporada–, forzándole personales en ataque y defensa, pérdidas de balón y tiros horrorosos. Solo el orgullo de Quique Garrido y Carles Bravo aparecieron al rescate. Adrian Moss estaba ‘fundido’, y en ocasiones no llegaba a la canasta rival. Le pesaron mucho los 32 minutos ‘pegándose’ en la zona con pívots que le sacaban dos cabezas.

En estas circunstancias Palencia no se dio cuenta, pero el partido estaba igualado a 65 puntos. Y solo quedaban 90 segundos. Muchas imprecisiones en el tiro, despropósitos deslavazados desde cualquier parte en forma de ‘mandarinas’, pases que no encontraban destino, etc. Es decir, un desastre. Y Menorca no estaba dispuesto a desaprovechar tal circunstancia. Apareció en los momentos clave el probablemente mejor jugador exterior nacional de la competición: David Navarro. Una canasta acrobática seguida de un robo de balón y posterior mate ponía a Menorca por delante por primera vez en el partido (65-67). El resto fue sencillo. Palencia se deshizo completamente y se dedicó a hacerle faltas a Dani Pérez, que encima estaba exquisito desde el 4,60 (7 de 8 para un total de 16 puntos). ¿En ataque? Se puede decir que intentaron remediarlo, pero un ‘airball’ de Swanston y una asistencia de Ian O’Leary a un hombre invisible que pululaba por la cancha dieron al traste con cualquier oportunidad. Lezcano se la había jugado con tres ‘pequeños’: Garrido-Mena-Konate. El experimento no funcionó, y Menorca terminó confirmando su mayor temple en los momentos calientes del partido y la superioridad en el fondo de armario. Es un escándalo que Moncasi juegue solo 14 minutos y Otegui 16, pero por ahí pululan un tal Arteaga y un tal Morentín, y a cada rato uno de los cuatro se activaba. Por algo se comenta que tienen uno de los mejores juegos interiores de la competición… Victoria de experiencia, coraje y temple para Menorca, y Palencia que no ha podido dar definitivamente el golpe encima de la mesa, y terminará el año contra dos regalitos de navidad llamados Socas Canarias y Baloncesto La Palma. Casi nada…

Declaraciones:

Chema Berrocal: El técnico balear destacó la pelea de su equipo hasta el último minuto ante uno de los rivales más complicados de ganar en casa. “Mi valoración es positiva, como siempre que se consigue una victoria. Por el equipo que teníamos enfrente era un partido muy duro, pero esta vez hemos jugado los 40 minutos muy concentrados en una de las canchas más difíciles de la competición. Hemos logrado parar bien a Moss en el último cuarto y hemos aprovechado nuestras ventajas en el juego interior. Hemos marcado la distancia en defensa.”

Natxo Lezcano: El técnico palentino no fue duro con sus jugadores y destacó “la labor seria” de los suyos en defensa y rebotes. “Hemos dominado el encuentro, aunque no de forma abrumadora. Estoy muy satisfecho por el trabajo realizado, pero no hemos culminado en los últimos cuatro minutos. No encontrábamos la manera de anotar. Hemos tenido miedo a ganar y Menorca lo ha aprovechado. Además, el vitoriano reconoció la influencia del cansancio de Adrian Moss en el último período y quiso recordar la baja importante de Jeff Xavier. “Hemos notado la baja de Jeff Xavier y hemos tenido que jugar de otra manera. Lógicamente, de tener un hombre que anota 20 puntos a no tenerlo hay una diferencia, pero ya contábamos con ello.”

Palencia Baloncesto: Mena (2), Carles Bravo (15), Swanston (9), O’Leary (14), Moss (18) –quinteto titular– Garrido (4), Konate (3), ‘Juanpe’ (0), Diouf (2), Leichtweis (0).

Menorca Básquet: Jiménez (6), Navarro (12), Matali (3), Otegui (1), Arteaga (13) –quinteto titular– Dani Pérez (17), Bas (0), Blanch (6), César Bravo (1), Morentín (10), Moncasi (2).