sábado, 17 de diciembre de 2011

Se rompe la gran racha de los palentinos


Palencia Baloncesto – Menorca Bàsquet (67-71)

Menorca asalta el ‘Marta Domínguez’ en un genial último cuarto

Se terminó la racha de victorias consecutivas en casa del Palencia. Esta noche el conjunto de Natxo Lezcano se arrugó en los momentos finales y dejó escapar un partido que tenía en el bolsillo. Menorca, por su parte, supo gestionar con más temple las últimas posesiones y aprovechó la profundidad de banquillo para llevarse una victoria importantísima fuera de casa. Ya es la tercera consecutiva, después de las conseguidas en Burgos y en La Palma, lo que sitúa a los hombres de Chema Berrocal a solo una victoria de los líderes de la competición de los humanos: Burgos y Lleida. Es decir, de los equipos que no son Canarias, que ya compite en otras lides.

El noveno triunfo de Menorca se fraguó a partir del segundo cuarto. En el primero salieron dormidos, dando la sensación de estar todavía calentándose de la helada castellana. Aguantaron hasta el empate a 6, pero después se dejaron ir cediendo una desventaja de 12 puntos (17-8) en el minuto 6 de partido. No podía ser. Palencia iba en proyección de 120 puntos ante el mejor equipo defensivo de la competición. La sangría se frenó en el 22-10 de final de cuarto. Ni Otegui, ni Oliver Arteaga eran capaces de parar las embestidas de un inspiradísimo Adrian Moss -8 puntos en el primer cuarto- y del ‘Gran Capitán’ Carles Bravo, autor de 7 puntos.

Los 18 puntos de Adrian Moss no fueron suficientes paar evitar la derrota de Palencia. Foto: Fernando Sancho

En el segundo cuarto el partido mutó a soporífero. Posesiones largas al borde de la bocina y muchísimas imprecisiones por parte de los dos equipos. Era el partido que le convenía a Menorca, a tanteador bajo. Los baleares redujeron la diferencia a 6 de la mano de Dani Pérez y en Palencia tan solo aparecía a fogonazos Ian O’Leary, que siempre disputaba el rebote ofensivo a los pívots insulares y sacaba buenos réditos. Al final de la primera parte consiguió 12 puntos y 7 rebotes, que unidos a los 16 puntos de Moss mantenían a Palencia por delante (37-29). En Menorca brillaba Dani Pérez por su dirección y anotación (8 puntos).

No obstante, ambos equipos se animaron tras el descanso. David Navarro y Arteaga acercaban a su equipo a solo tres puntos (41-38), pero Palencia volvía a marcharse gracias a un 2+1 de Kyle Swanston –sigue en el equipo por la baja de Jeff Xavier– y el coraje del californiano O’Leary. Varias acciones positivas de Andreu Matali acompañadas de un triple del hoy irregular Jorge Jiménez, ponían el 48-44 en el marcador, pero un triple de Swanston y dos acciones espectaculares de O’Leary, machacando el aro balear, devolvían el partido a las ventajas del primer cuarto (55-46). Sin embargo, Menorca aplicó la lógica del razonamiento al juego y no desesperó. Siguieron los balones en la zona a Arteaga, que jugaba con inteligencia forzando personales de Palencia, y apareció el eléctrico Marc Blanch para reducir la sangría (57-50 al final del tercer periodo). Palencia no estaba defendiendo demasiado. Michel Diouf apenas jugó 10 minutos hasta el último cuarto y los ‘morados’ vivían de las asistencias de Mena (5) y la brega en la pintura de O’Leary: 14 puntos y 11 rebotes –7 de ellos ofensivos–.

Kyle Swanston lanza un triple ante la oposición de Matali. Foto: Fernando Sancho


El último período certificó y dio fe de un calamitoso Palencia Baloncesto al que no le salió nada en comparación con los otros tres cuartos, y ensalzó la figura de un incógnito hasta el momento: Roberto Morentín. El pucelano escenificó el horroroso 2 de 12 en tiros de dos de Palencia en este cuarto asegurando los rebotes defensivos y anotando un triple que metió definitivamente a Menorca en la pomada (62-57). Los de Berrocal hacían el trabajo de la hormiguita, poco a poco pero sin descanso. El banquillo era infinito. Salía Otegui y entraba Arteaga; se iba Matalí y Moncasi le sustituía. Y así iban cansando poco a poco a los palentinos. Moncasi se merendó fácilmente a Renan Leichtweis –no está siendo su temporada–, forzándole personales en ataque y defensa, pérdidas de balón y tiros horrorosos. Solo el orgullo de Quique Garrido y Carles Bravo aparecieron al rescate. Adrian Moss estaba ‘fundido’, y en ocasiones no llegaba a la canasta rival. Le pesaron mucho los 32 minutos ‘pegándose’ en la zona con pívots que le sacaban dos cabezas.

En estas circunstancias Palencia no se dio cuenta, pero el partido estaba igualado a 65 puntos. Y solo quedaban 90 segundos. Muchas imprecisiones en el tiro, despropósitos deslavazados desde cualquier parte en forma de ‘mandarinas’, pases que no encontraban destino, etc. Es decir, un desastre. Y Menorca no estaba dispuesto a desaprovechar tal circunstancia. Apareció en los momentos clave el probablemente mejor jugador exterior nacional de la competición: David Navarro. Una canasta acrobática seguida de un robo de balón y posterior mate ponía a Menorca por delante por primera vez en el partido (65-67). El resto fue sencillo. Palencia se deshizo completamente y se dedicó a hacerle faltas a Dani Pérez, que encima estaba exquisito desde el 4,60 (7 de 8 para un total de 16 puntos). ¿En ataque? Se puede decir que intentaron remediarlo, pero un ‘airball’ de Swanston y una asistencia de Ian O’Leary a un hombre invisible que pululaba por la cancha dieron al traste con cualquier oportunidad. Lezcano se la había jugado con tres ‘pequeños’: Garrido-Mena-Konate. El experimento no funcionó, y Menorca terminó confirmando su mayor temple en los momentos calientes del partido y la superioridad en el fondo de armario. Es un escándalo que Moncasi juegue solo 14 minutos y Otegui 16, pero por ahí pululan un tal Arteaga y un tal Morentín, y a cada rato uno de los cuatro se activaba. Por algo se comenta que tienen uno de los mejores juegos interiores de la competición… Victoria de experiencia, coraje y temple para Menorca, y Palencia que no ha podido dar definitivamente el golpe encima de la mesa, y terminará el año contra dos regalitos de navidad llamados Socas Canarias y Baloncesto La Palma. Casi nada…

Declaraciones:

Chema Berrocal: El técnico balear destacó la pelea de su equipo hasta el último minuto ante uno de los rivales más complicados de ganar en casa. “Mi valoración es positiva, como siempre que se consigue una victoria. Por el equipo que teníamos enfrente era un partido muy duro, pero esta vez hemos jugado los 40 minutos muy concentrados en una de las canchas más difíciles de la competición. Hemos logrado parar bien a Moss en el último cuarto y hemos aprovechado nuestras ventajas en el juego interior. Hemos marcado la distancia en defensa.”

Natxo Lezcano: El técnico palentino no fue duro con sus jugadores y destacó “la labor seria” de los suyos en defensa y rebotes. “Hemos dominado el encuentro, aunque no de forma abrumadora. Estoy muy satisfecho por el trabajo realizado, pero no hemos culminado en los últimos cuatro minutos. No encontrábamos la manera de anotar. Hemos tenido miedo a ganar y Menorca lo ha aprovechado. Además, el vitoriano reconoció la influencia del cansancio de Adrian Moss en el último período y quiso recordar la baja importante de Jeff Xavier. “Hemos notado la baja de Jeff Xavier y hemos tenido que jugar de otra manera. Lógicamente, de tener un hombre que anota 20 puntos a no tenerlo hay una diferencia, pero ya contábamos con ello.”

Palencia Baloncesto: Mena (2), Carles Bravo (15), Swanston (9), O’Leary (14), Moss (18) –quinteto titular– Garrido (4), Konate (3), ‘Juanpe’ (0), Diouf (2), Leichtweis (0).

Menorca Básquet: Jiménez (6), Navarro (12), Matali (3), Otegui (1), Arteaga (13) –quinteto titular– Dani Pérez (17), Bas (0), Blanch (6), César Bravo (1), Morentín (10), Moncasi (2).

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Sacramento Kings: A despedirse dignamente

La crisis apremia. Y este puede ser el último año de existencia de un equipo histórico como los Kings. O por lo menos, su última campaña en la capital californiana de Sacramento antes de mudarse al sur estatal, rumbo a Anaheim. La trayectoria del club puede definirse como itinerante. Fueron los Royals de Rochester en 1945, y más tarde viajaron por Cincinnati y Kansas City-Omaha, hasta asentarse definitivamente en Sacramento en 1985. Un único título les avala, el que consiguieron en 1951. Su historia reciente está marcada por aquella final de conferencia contra L.A. en 2002, la que muchos consideraron como el mayor robo de la historia del deporte. Dick Bavetta sabe algo de aquello.

Los hermanos Maloof consiguieron salvar al equipo sobre la bocina la pasada temporada, pues la compra por parte del dirigente de NHL, Henri Samueli, dueño de los Ducks de Anaheim, se truncó en el último minuto. Incluso, en el registro de los equipos aparecían ya los Anaheim Royals para la presente temporada. Muchos pensaron que el último partido iba a ser contra Los Lakers, precisamente, en el rebautizado Power Balance Pavillion (el Arco Arena de siempre con distinto nombre). Era el destino. Terminar contra el gran rival. El 13 de abril Los ‘paletos’ habían preparado todo el parapeto. Incluso, el final tenía toda la lógica del mundo: Kobe Bryant remontando en el último minuto para quitarles el caramelo, como siempre. Pero una especie de milagro desbloqueó todo aquello.


El 3 de mayo David Stern confirmó que Sacramento Kings seguía un año más. No obstante, lejos de ser un cheque en blanco, aquella noticia era solo un espejismo. ¿Por qué? Porque la NBA les pide tener un pabellón nuevo. A principios de abril, el club vendió los derechos del pabellón Arco Arena al consorcio Power Balance, que en la actualidad está en quiebra. Pero no es suficiente Si no encuentran un aval pronto o alguien se hace cargo de la construcción de ese pabellón –tienen de plazo hasta marzo– no les quedará más remedio que mudarse. Esa es la gran barrera de difícil superación para los Kings: la liquidez. Los Maloof no encuentran inversión en el entorno de la ciudad y el equipo tampoco levanta pasiones en lo deportivo. Esta conjunción ofrece un panorama poco halagüeño y la sensación de estar viviendo lo que otras ciudades históricas de baloncesto como Vancouver o Seattle ya vivieron en el pasado. Al parecer, la salida hacia Anaheim no acaba de convencer a los tres equipos que operan en el mercado radial del sur de California, véase: Clippers y Lakers en Los Ángeles, y Warriors en la cercana bahía de Oakland, San Francisco. Éstos reclaman que un cuarto equipo en tan poco territorio desestabilizaría el equilibrio comercial de cada franquicia.

Sin embargo, los Kings necesitan dinero para continuar, y difícilmente renunciarán al patrocinio por parte del dueño de los Ducks, o de quien sea. Han sobrevivido a una posible reducción de franquicias post lockout –tema que finalmente no se puso sobre la mesa de negociación, pero sobre el que debatieron los expertos en la liga–, pero apenas pueden soportar la carga salarial de pagar en nómina el 85% del tope salarial que exige el nuevo convenio, que supondría cerca de 44 millones de dólares. De hecho, son el equipo que menos dinero paga en salarios junto con los Hornets (tienen comprometidos unos 40 millones actualmente) y podrían ser uno de los grandes beneficiados del nuevo impuesto de lujo, que grava entre un 50% y un 300% –en casos muy flagrantes– a los equipos que se excedan del límite salarial con respecto al anterior convenio. Por eso, el reparto del fondo de compensación les beneficiaría, hasta cierto punto. Es innegable que económicamente el club está al borde del colapso, y unos cuantos millones de dólares no solucionarían prácticamente nada. La situación real es la siguiente: los hermanos Maloof asumieron en 1999 una deuda de 77 millones de dólares que no para de crecer, y su franquicia de hoteles y casinos en Las Vegas corre serio peligro. Incluso, hace dos temporadas tuvieron que ‘desarmar’ su proyecto WNBA, las Sacramento Monarchs. De momento, Bob Cook, propietario minoritario del equipo, está en la ruina y va a tener que desprenderse de su parte del pastel. Aunque los Maloof han desmentido que este problema les afecte a ellos, lo cierto es que es difícil que puedan asumir más cargas fiscales por la deuda acumulada. Otro empresario californiano, Ronald Burkle (figura en el puesto 400 de la lista Forbes), dueño de cadenas de alimentación, una empresa petrolera y parte muy importante del lobby demócrata de apoyo a Hilary Clinton –se calcula su fortuna en 3,2 billones de dólares– también ha sonado como posible comprador del equipo. Sea quien sea, la viabilidad en Sacramento parece imposible, después de todos estos datos. Con la salida de Sacramento en mente, ahora toca analizar cómo será la previsiblemente última temporada de los Kings.

En el apartado deportivo, el equipo se debate en una continua regeneración, que año tras año les convierte en favoritos para la lotería de los rookies. Lejos quedó la época dorada de principios de 2000, con jugadores como Webber, Divac, Stojakovic o Jason Williams, y desde entonces el equipo ha ido perdiendo uno a uno a todos sus eslabones: Mike Bibby, Gerald Wallace, Ron Artest y Brad Miller. La última vez que llegaron a playoff fue en 2006 para caer en primera ronda contra San Antonio Spurs por 4-2.

Desde entonces, encadenan records negativos año tras año, apenas superando las 20 victorias en liga regular. Con una temporada reducida de 66 partidos, veremos si son capaces si quiera de alcanzar esa cifra de las 20 victorias. Para ello, deben confiar en su buque insignia: Tyreke Evans, y en su salud, siempre dudosa debido a problemas graves de fascitis plantar. Paul Westphal debe equilibrar un banquillo joven, además, que apenas llega a los 25 años de media. La marcha de Samuel Dalembert, agente libre que cobraba 13 millones, ha obligado a los Kings a hacerse con un par de contratos altos para compensar ese desequilibrio salarial, como son el de Chuck Hayes y John Salmons. Juntos cobrarán algo más de la ficha de Dalembert. John Salmons 8,5 millones por temporada y Hayes algo más de 5 millones, pues ha firmado como excepción de nivel medio. Pueden aportar defensa interior, en el caso de Chuck, y ráfagas de anotación irregular, en el caso de John, que por cierto vuelve a casa tras su discreto periplo por Milwaukee. Por lo demás, se especula con la salida hacia New Jersey Nets por parte de Demarcus Cousins, uno de los mejores pívots rookies la pasada temporada, y del propio Tyreke Evans hacia los Knicks. Estos rumores podrían ser infundados, pues lo que el equipo necesita es pagar más salarios, no deshacerse de la ficha de dos rookies (contractualmente hablando). Podrían estar interesados en varios agentes libres como Nick Young y Andrei Kirilenko para alcanzar ese 85% del límite salarial.

De todas formas, en la actualidad el equipo presenta un desajuste en la dirección. Cuentan con Evans y Beno Udrih, dos grandes anotadores pero que no dan el perfil de director clásico. La llegada del rookie Isaiah Thomas (nada que ver con el Bad Boy) es una incógnita. Gran anotador en los Huskies de Washington, su juego y su físico se asemejan mucho al de Nate Robinson. No parece ser el perfil de director que necesita Sacramento.

Precisamente, incógnita también será el juego exterior. La renovación de Marcus Thornton debe asegurar un buen caudal de puntos por partido, pero resulta que Sacramento drafteó a un jugador de ese perfil: Jimmer Fredette, y se hizo también con el ya citado John Salmons, por lo que el concurso de egos está asegurado. En teoría, Thornton parte por delante de ellos, pero la necesidad real de un nuevo ídolo blanco nacido en EE.UU en la liga –disculpen la comparación Larry B. y John S.– puede darle toda la responsabilidad a Fredette. Kevin Durant ya lo ha bautizado como “el mejor anotador del mundo”, pero en Rucker Park también se prodigan grandes muñecas y eso no es ninguna garantía para triunfar en la NBA. Por tanto, el reto de Jimmer será desbancar a otros ídolos encumbrados antes de tiempo como Wally Szczerbiak, Kyle Korver o J.J. Redick. Su juego es comparable al de Jaycee Carroll. Ambos son mormones, con una técnica de tiro exquisita, buena lectura del juego ofensivo y capacidad para generarse sus propios tiros. Los dos anotaron más de 2.500 puntos en la NCAA, pero no superan el metro noventa, lo cual es un gran hándicap en la NBA.

En la posición de alero el equipo sigue contando con el veterano Francisco García, sólido como pocos en defensa, con buena mano en el tiro exterior, pero con un historial de lesiones considerable; y han drafteado a Tyler Honeycutt, un jugador del estilo de García, con un físico privilegiado (pura fibra), aunque quizá demasiado ‘Betty Spaghetti’. Vamos, que necesita comerse unos buenos platos de esos que no come ahora Eddy Curry. Proviene de la universidad de UCLA y en principio aparece como uno de los ‘tapados’ del equipo. Fue segunda ronda del draft y destaca por sus largos brazos, su espectacularidad en los mates y por la defensa, que falta le hace al equipo.

Jimmer Fredette, Tyler Honeycutt e Isaiah Thomas. Los tres 'rookies' de los Kings para la temporada 2011-2012.

En la pintura, parece que es donde más garantías ofrece el equipo, de momento. La llegada del ala-pívot JJ Hickson desde Cleveland a cambio del alero Omri Casspi, le ofrece a Sacramento un equilibrio en la pintura. La pasada temporada asumió todo la responsabilidad de guiar a los Cavs. Puede anotar fácilmente y destaca en el aspecto reboteador (14-8 la pasada campaña). Cousins consigue un socio ahí y dos jugadores como Hayes o Jason Thompson parecen buenos recambios para asegurar la decencia defensiva (Hayes sobre todo) y el talento y la brega en la pintura (Thompson). Sin embargo, adolecen de un ‘perro grande’. Demarcus es lo más parecido, pero no es un siete pies, y el ‘sophomore’ Hassan Whiteside apenas cuenta con la confianza del entrenador.

Pero que nadie se lleve a engaños. El equipo tiene talento, pero le falta un líder, un jugador franquicia que les guíe a playoffs. De momento, Evans no lo ha logrado en sus dos años en la liga, ni se ha acercado. El equipo es un equipo perdedor por concepción, y Westphal tampoco aporta soluciones desde el banquillo. Habrá que ver cómo se adaptan Fredette y Honeycutt y si Tyreke Evans asume definitivamente el papel de estrella, para saber si Sacramento puede montar una franquicia competitiva, aunque sea a partir del año que viene en Anaheim.

Quinteto: Udrih, Evans, García, JJ Hickson, Cousins.
6º hombre: Fredette/Thompson.
Altas: JJ Hickson (Cavaliers), Chuck Hayes (Rockets), John Salmons (Bucks), Jimmer Fredette (R-Brigham Young) Tyler Honeycutt (R-UCLA), Isiah Thomas (R-Washington Huskies), Lawrence Hill (FA-Texas Legends), Adrian Oliver (FA-Aris Tesalónica).
Bajas: Omri Casspi (Cavaliers), Pooh Jeter (FIATC Joventut), Samuel Dalembert (FA), Marquis Daniels (Boston Celtics), Darnell Jackson (FA), Jermaine Taylor (FA).
Previsión: Fuera de Playoffs (20-46).

martes, 13 de diciembre de 2011

Jugando a la Play Station


Jugando a la Play Station

“La NBA es cada vez más negocio y menos deporte”, decía Pau Gasol esta semana. El ala-pívot de Sant Boi de Llobregat se ha sincerado. No es una salida de tono como tal, ni un exabrupto por rencor, ni siquiera una licencia literaria. Pau no necesita más dinero de Los Ángeles, ni más fama, ni por supuesto vivir en un mundo irreal. Pero seguramente exija respeto con estas palabras. Cuando una superestrella de este calibre se mueve en la NBA, el mercado se renueva y todos ven moverse rondas del draft, jugadores fracasados, jóvenes promesas, etc. de un lado a otro. Los topes salariales se desequilibran, las ‘amnistías’ comienzan a aparecer, todo se descontrola. Realmente, esto siempre ha pasado en la NBA, pero nunca a los niveles de esta temporada. El ‘lockout’ ha dejado solo dos semanas para negociar todo un plan anual, y las prisas, que no son nunca buenas consejeras, están alumbrando traspasos calamitosos que más tarde darán lugar a digestiones pesadas.

Solamente un dato. El viernes 9 se abrió el nuevo marco de contratación. Pues bien, en tan solo 4 días ha habido, y no se me asusten, ¡259 contratos! Lógicamente, para ser precisos, habría que desglosar entre traspasos entre franquicias –un total de 68–, jugadores que firman para probar en los campos de entrenamiento, nuevos contratos a los rookies, agentes libres, etc. Pero hay detalles tan vomitivos que realmente da vergüenza hasta saber que se están llevando a cabo. Un traspaso muy curioso que tuvo lugar el primer día de fichajes: Milwaukee Bucks fichó a Keyon Dooling –aquel prometedor base que perdió en Lisboa ‘99 la final del Mundobasket juvenil contra nuestros Juniors de oro– y obtuvo una segunda ronda de draft de los Boston Celtics a cambio de, agárrense los machos, los derechos del alero ¡Albert Miralles!

…Poco que añadir. Albert Miralles es un jugador de 29 años que se formó en la cantera de Joventut de Badalona y que probó las mieles del sistema universitario estadounidense en Indianápolis y Forth Wood. Fue drafteado por Toronto Raptors en el año 2004 en el puesto número 39 de segunda ronda, e inmediatamente sus derechos pasaron a Miami Heat. Pero jamás ha pisado una cancha NBA en competición oficial. Sin embargo, después de 7 años, sigue siendo un cromo válido para traficar en aquella liga. Ahora juega en el Angélico Biella de la Lega italiana, pero Boston tiene su cromo en Estados Unidos. Con él puede negociar y trapichear todo lo que quiera. Con este dato entendemos más las declaraciones de Gasol, que observa atónito como su compañero de equipo y amigo Lamar Odom se va a Dallas Mavericks a cambio de nada, solo para aligerar la carga salarial del equipo, como puede llegar a entrar él mismo en hasta tres traspasos distintos cada día, etc. 

Pau Gasol y Chris Paul luchan por un balón. Los General Manager de la NBA luchan traficando con sus contratos. Foto: Agencia EFE


En estas circunstancias, es difícil entender algo o intentar explicar las intenciones reales de los General Managers de aquella liga. A mí se me ocurre que piensan que a la NBA se juega como a un juego de la Play Station, haciendo traspasos caprichosos para tener el equipo con más All-Star y que más pueda fardar en las pistas. Ahora se han puesto de moda los ‘Big Three’. Sin problemas. Unas pocas horas de juego para planear los traspasos y las vidas de los jugadores en una incógnita existencial, en una encrucijada entre lo honorable y la desfachatez de comprobar en sus propias carnes los efectos más perniciosos de ser carne humana, simple mercancía, tráfico de trabajadores. Cobran mucho dinero a cambio, dirán algunos. Pero se convierten en cromos que viajan de un lugar a otro dependiendo del capricho de sus dueños. Todo esto está permitido. Por todo esto se han estado peleando durante meses sindicato y patronal. Parecía legal la defensa de Billy Hunter y Derek Fisher a los jugadores. Pero viendo los efectos del cierre patronal, a veces es difícil pensar si no hubiera sido mejor que no hubiera comenzado la temporada…

sábado, 10 de diciembre de 2011

Más sorpresas en la apertura de los 'Training Camps': Brandon Roy se retira

Las últimas 24 horas en la NBA han sido frenéticas y muchos las califican como lo más ‘WTF’ de la historia de la liga. Y es normal. En apenas 15 días comienza la competición y todos necesitan moverse ágilmente en las dos semanas que tienen para plantear la temporada de los 66 partidos. Hace pocas horas se confirmaba una triste noticia para los amantes de este deporte. Una vez más, la ‘negra’ les vuelve a tocar a los Blazers, el equipo maldito de Oregón. El escolta franquicia Brandon Roy podría anunciar su retirada el próximo viernes, según ESPN.com.

El jugador de Seattle ha sufrido durante sus cinco temporadas en la NBA numerosos problemas de rodilla, que finalmente van provocar su retirada precoz del baloncesto profesional. Él mismo ha confirmado que no tiene cartílagos en las rodillas, y en esas condiciones prefiere favorecer a su franquicia y liberar su contrato que esta temporada será de 14,9 millones de dólares. De esta forma, los Blazers no tendrán que pagar el impuesto de lujo ni aplicar la famosa ‘cláusula de amnistía’ sobre Roy. Según las normas de la NBA, aunque Roy anuncie su retirada, oficialmente el club no podrá liberar su salario hasta el 28 de abril de 2012, ya que se necesita un año desde que el jugador disputa su último partido hasta que por lesión o enfermedad no pueda retomar la práctica deportiva de manera saludable. Y Roy disputó su último partido en la primera serie de ‘Playoffs’ contra los Dallas Mavericks que perdieron los Blazers (4-2).

Brandon Roy deja el baloncesto por sus lesiones de rodilla. Foto: Imagenesfotos.com

Brandon Roy fue elegido en el número 6 del draft de 2006 por los Minnesota Timberwolves, que lo traspasaron a Portland por el escolta Randy Foye. A pesar de que solo pudo disputar 57 partidos en su año de rookie, consiguió el premio de Rookie de la Temporada esa misma temporada 2006/2007 promediando 16,8 puntos, 4,4 rebotes y 4 asistencias por partido. Fue tres veces jugador ‘All-Star’ y promedió durante su carrera 13,7 puntos, 2,4 rebotes y 3,5 asistencias, consiguiendo su tope personal en anotación con 52 puntos contra Phoenix Suns en 2008. Deja el baloncesto a los 27 años.





No obstante, no es la única noticia para Portland Trail Blazers. En las últimas horas Greg Oden ha aceptado la qualifying offer que le ofreció su club en junio y por tanto cumplirá íntegramente el contrato que firmó como rookie en 2007 y cobrará 8,9 millones. Así, se desmienten los últimos rumores que situaban al maltrecho número 1 del draft de 2007 en Miami Heat. Oden ha disputado tan solo 88 partidos en sus 4 temporadas como profesional y no disputa un partido oficial desde hace dos años –concretamente desde el 5 de diciembre de 2009–.

Precisamente, el equipo del sur de Florida, los Miami Heat, han reaccionado rápido para reforzar el equipo y se han hecho con los servicios de dos agentes libres de prestigio: Shane Battier y Eddy Curry. El veterano ex jugador de Houston Rockets y Memphis Grizzlies, Shane Battier, aportará a sus 33 años defensa y tiro exterior al ‘Big Three’. Por su parte, el fichaje del pívot Eddy Curry puede ser la última oportunidad para el ex de los New York Knicks de demostrar a sus 29 años la clase que atesora en ese gran cuerpo de 213 centímetros y más de 130 kilos.

Milwaukee Bucks se hace con el talentoso ala-pívot de los Pacers Mike Dunleavy hasta 2013 por 7,5 millones, e Indiana Pacers cubrirá su baja con Jeff Pendergraph.

Otro ‘bombazo’ es la llegada del nómada Tracy McGrady a las filas de Atlanta Hawks por el salario mínimo para veteranos, alrededor de los 3 millones de dólares. El dilema será qué se puede esperar del veterano alero de 31 años, lastrado por las lesiones de rodilla toda su vida deportiva y que el pasado año no demostró ser ya un jugador de primer nivel en Detroit Pistons.

En ‘La Gran Manzana’, de momento solo se ha confirmado la renovación del pívot Jared Jeffries, por el mínimo salarial de 1,3 millones. Ojito derecho de Mike D’antoni, el ex jugador de Houston Rockets será el ‘pegamento’ que necesitan defensivamente los Knicks. También han anunciado que siguen dos agentes libres como Shelden Williams y Derrick Brown, aunque hay intereses de los Nets en hacerse con el primero de ellos. A la espera de poder confirmar algún fichaje de relumbrón, pierde fuelle la opción por el base Chris Paul. Los Knicks ofrecen a Amare Stoudamire por él, pero tras la decisión de la NBA de vetar el traspaso con L.A., parece que los Knicks tendrán pocas opciones de conseguir a Paul antes del próximo 30 de junio, cuando quede libre. El General Manager, Donnie Walsh, estaría intentando contratar a uno de los agentes libres más cotizados de la NBA: Tyson Chandler. Podrían ofrecerle un contrato de 58 millones por los próximos 4 temporadas y aplicar la ‘cláusula de amnistía’ al base Chauncey Billups, para liberarse de los 14,2 millones de su contrato. Los Warriors también están interesados en el Campeón de la NBA, pero parece que la oferta de Nueva York tiene más posibilidades. Con este contrato, la cotización de Marc Gasol sube automáticamente y podría firmar un gran contrato con Memphis Grizzlies o con otro equipo que necesite un pívot de garantías.

Otros traspasos importantes confirmados en este frenético viernes han sido:

-Marquis Daniels renueva con los Boston Celtics.
-Tayshun Prince hace lo propio con Detroit Pistons.
-Earl Watson renueva con Utah Jazz.
-Kyle Irving firma su contrato como ‘rookie’ con los Cavaliers, que todo hace indicar que ‘amnistiarán’ a Baron Davis para deshacerse en el tope salarial de los 29 millones en 2 años del base californiano.
-Larry Hughes vuelve del profundo abismo que ha sido su carrera profesional y firmará con los Magic, tras la amnistía aplicada sobre Gilbert Arenas, como también confirmamos aquí en Todoxpordeportes.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

¿Falsas ilusiones?


L.A. anuncia liquidaciones. Todo es prescindible excepto su factótum Kobe Bryant, señor de los 5 anillos y dueño espiritual de un club vacío de valores e imbuido en las múltiples fórmulas matemáticas para crear un nuevo ‘Gran Trío’ capaz de reconquistar la liga. En ningún manual de éxito se proclama que sea esencial unir a tres tíos líderes por separado para crear un grupo invencible. Es más, en Los Ángeles deberían recordar lo que pasó en 2004 con sus ‘4 Fantásticos’. El resbalón histórico que se pegaron Gary Payton, Shaquille O’Neal, Karl Malone y el propio Kobe Bryant contra aquellos herederos de los ‘Bad Boys’ de Detroit fue tan mayúsculo que aún se recuerda. Además, la pasada temporada el ‘poderoso’ ‘Gran trío’ de Miami se convirtió en comida rápida para el alemán Dirk Nowitzki, que sabiamente acompañado por jugadores de segundo nivel en la liga como Jason Terry, José Barea o Tyson Chandler se merendaron a los principales candidatos de South Beach y demostraron que un ‘Big Three’ no es infalible.

Por tanto, renunciar a todo un bloque por buscar la opción mediática y opípara de reunir en Los Ángeles a Chris Paul y Dwight Howard no asegura nada al equipo de Mike Brown. No obstante, el negocio manda en la NBA, el dinero es lo más importante. Todo es espectáculo y todo se intenta rentabilizar. Si la pasada temporada Kobe Bryant decía que Pau Gasol era el fichaje más importante que habían hecho los Lakers en su historia, esta temporada no tendrá ningún reparo en sustituir esta aseveración por una parecida con Chris Pal o Dwight Howard. Incluso, en una votación histórica los aficionados de Lakers votaron a Pau Gasol como el mejor ‘4’ de la historia de la franquicia por delante de ilustres como James Worthy o Jamaal Wilkes. Puro marketing temporal.

L.A. podría completar un 'Big Three' de ensueño: Dwight Howard, Kobe Bryant y Chris Paul. Foto: Laverdad.com

Pero si Jerry Buss consigue deshacerse de su ‘cementerio de elefantes’, véase: Derek Fisher, Ron Artest, Lamar Odom y… ¿Pau Gasol? habrá descompuesto en un instante el equipo que le dio dos anillos, seguirá dependiendo de Kobe Bryant y sus 33 años, que si bien le dan la vitola de gran líder, guardan en su cifra el peso de las múltiples lesiones con las que siempre ha convivido Bryant, y pondrá su futuro en manos de dos grandísimos jugadores como Chris Paul y Dwight Howard, dos de los mejores jugadores mundiales en sus posiciones, pero que deberán relegar su condición de estrellas mundiales a los 30 tiros por partido de Kobe.

¿Conseguirá Mike Brown manejar a esas tres fieras? Ese es el problema. Bryant ha aprendido a ser más solidario desde que llegó Pau en 2008, pero aún así sigue siendo por naturaleza un jugador ‘abusón’. Y Chris Paul también lo es. Y si Howard no es la referencia en la pintura –donde por cierto, se solaparía con Andrew Bynum, aunque en principio el ‘center’ también es prescindible– podría haber problemas de actitud si los tres no se sienten protagonistas. Además, Lakers quiere reforzar esa posición de ala-pívot con el jugador de los Hornets David West, pero el equipo de Nueva Orleans, que está intervenido por la NBA, ha anunciado que no acepta el traspaso con Pau Gasol. Seguramente, Lakers busque un intercambio para traer a Paul y David West a cambio de Pau y Lamar Odom o Ron Artest, pero Nueva Orleans no tiene prisa por firmar un intercambio, ya que Nueva York también está muy interesado en hacerse con los servicios de Chris Paul y podrían ofrecer un mayor número de jugadores por su traspaso.

De momento, lo que es seguro es que Chris Paul no ha renovado con los Hornets una extensión de su contrato, y así obliga a un traspaso con los Knicks, Lakers o con otro club para que Nueva Orleans reciba algo a cambio. Si no, el próximo verano se convertiría en agente libre y los Hornets no conseguirían nada a cambio por su jugador franquicia. También es seguro que Lakers prescindirá de Odom o Artest, teniendo en cuenta que hoy mismo han anunciado el fichaje del alero Jason Kapono, ex jugador de los Sixers y agente libre hasta hoy. Por Dwight Howard podrían ofrecer a Andrew Bynum y Lamar Odom.

Pero todas estas conjeturas han sido desmentidas por el General Manager de los Lakers, Mitch Kupchak, quien las atribuye al nuevo período de fichajes post ‘lockout’ y a la rumorología propia de estos días. No sabremos si son o no falsas ilusiones hasta que se empiece a mover el mercado. Si el año pasado fue Lebron James el factor desencadenante del resto de traspasos, este año parecen serlo Chris Paul y Dwight Howard. Mientras tanto, incesantes rumores sobrevuelan la liga a dos días de que se inaugure la pretemporada y con el nuevo convenio pendiente de aprobación por parte de los jugadores. Si la temporada comienza el día 25, lo que es cierto es que durante más de dos semanas nos esperan emociones fuertes.